Encontrar el fármaco para dejar de fumar en 25 días en Salamanca, misión imposible

El medicamento para dejar de fumar en solo 25 días, el Todacitán, está arrasando entre los salmantinos y está provocando un peregrinaje de salmantinos, que van de farmacia en farmacia en busca de un producto que está en situación de desabastecimiento.

«No es que no se fabrique o no se suministre. El problema es que no tiene un servicio de distribución normalizado. Nos están llegando con cuentagotas. A lo mejor en una remesa recibimos unos cuantos envases y a la siguiente no nos llega nada», puntualiza el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Salamanca.

Quienes han probado el Todacitán confirman que han conseguido dejar de fumar sin excesivo sufrimiento y ese boca a boca de quienes ya lo han probado es lo que ha generado una enorme demanda entre cientos de salmantinos que quieren intentarlo.

«Cuando no lo encuentran en su farmacia habitual, lo dejan encargado y prueban en otras farmacias. A veces, para un mismo cliente se han generado diversas reservas», explican los profesionales farmacéuticos. La presidenta del Colegio Oficial, María Engracia Pérez, recuerda que las boticas salmantinas cuentan con un sistema llamado 'FarmaHelp' y que podría evitar este deambular de clientes en busca de medicamentos que escasean. Básicamente consiste en que si la farmacia habitual de un cliente no dispone del producto necesario, lo notifica en la aplicación. «En este caso sería decir que tienes a un cliente buscando el Todacitán. El aviso salta y si alguna farmacia cercana tiene algún envase disponible lo notifica, se lo dejamos reservado y le enviamos al cliente a su farmacia para que ya vaya sobre seguro», explica María Engracia Pérez, que asegura que «el sistema se usa diariamente y está funcionando muy bien» dado que cada vez hay más fármacos en desabastecimiento.

El Todacitán salió al mercado con un precio de casi 200 euros. Actualmente tiene un coste, sin financiar, de 117 euros, pero cuando se receta por un médico el precio ronda los 55 euros. No todas las personas que lo soliciten tienen garantizada la financiación del fármaco.

Primeramente tendrán que demostrar motivación expresa para dejar de fumar, con constancia de un intento de dejar de fumar en el último año. Por otra parte, deben ser fumadores que consumen más de diez cigarrillos al día y sufrir un alto nivel de dependencia según el test de Fagerström.

Los efectos secundarios más frecuentes entre los fumadores que lo han utilizado son un aumento del apetito, mayor irritabilidad durante la primera semana, sequedad de boca, diarrea y un aumento de la presión arterial.

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