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Viernes, 13 de enero 2023, 20:17
Ni siquiera la covid ha conseguido desbancar a los problema cardiacos como la primera causa de muerte en Castilla y León. “El pasado año murieron en Castilla y León 8.264 personas por diversos problemas de corazón”, destaca Armando Oterino. Por detrás de los episodios cardiacos se sitúan actualmente los tumores y, en tercer lugar, la covid.
De esas 8.000 muertes por problemas de corazón, en torno a un millar son infartos. Afortunadamente, el número de infartos que no terminan en fallecimiento son cada vez mayores. “Solo en Salamanca se pueden atender cada año más de 1.000 infartos de miocardio”, indican. Todos los días se atienden varios infartos en el Complejo Asistencial de Salamanca y a partir de ahora todos los que reciban el alta lo harán con un nuevo protocolo que incluye el volante para someterse a una primera analítica de control del nivel de colesterol.
“Esta media anual de infartos no ha disminuido durante los últimos años en los que habido una pandemia. Es un ritmo bastante homogéneo. La lectura positiva que podemos sacar de esta estadística es que la mortalidad sí que ha bajado gracias a las angioplastias. La lectura negativa es que los infartos se siguen produciendo e, incluso, se repiten, por lo que tenemos que incidir en el trabajo de prevención como el proyecto que vamos a poner en marcha porque un colesterol que no se controla de forma óptima se relaciona, a largo plazo, con una mayor tasa de infartos”, argumenta el médico vallisoletano afincado en Salamanca.
Aunque se aproximan grandes avances desde el punto de vista farmacéutico, por el momento no hay fórmulas mágicas frente al colesterol. “Las claves siguen siendo tener un estilo de vida saludable, que pasa por seguir una dieta mediterránea, evitar la obesidad y respetar la medicación”.
Los principales tratamientos frente al colesterol se basan en fármacos por vía oral y en fármacos inyectables. “Con las inyecciones recibes un pinchazo cada 15 días y el colesterol llega a bajar un 60%. El reto con el colesterol LDL sería bajarlo, si fuera posible, hasta los niveles más bajos”, informan.
En los próximos años se avecinan tratamientos que pueden ser revolucionarios para cuidar un factor de riesgo tan determinante como es el colesterol. La industria farmacéutica tiene abiertas en torno a una decena de nuevas líneas de tratamiento y una de las más llamativas puede ser la denominada ‘vacuna contra el colesterol’, aunque los especialistas matizan que el concepto vacuna puede llevar a equívoco y hacer pensar al paciente que una vez que reciba este tratamiento puede descuidar su dieta sin miedo al colesterol.
A diferencia de los tratamientos similares de los que ya se dispone, esta vacuna tiene como principal peculiaridad que solo requiere de dos inyecciones al año. Consigue una enorme reducción del nivel de colesterol malo, aunque lógicamente no sustituye a la conveniencia de una dieta equilibrada.
El Reino Unido es el primer país del mundo en contar con esta vacuna cuyo funcionamiento se basa en silenciar el gen PCSK9 para que el hígado absorba más colesterol malo de la sangre y lo descomponga. Un tratamiento que promete salvar decenas de miles de vidas todos los años.
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