«A día de hoy, sobrevivir a una cardiopatía es más fácil»

Las cardiopatías congénitas figuran entre las anomalías más habituales que se dan al nacer y resultan ser la causa del 20% de las muertes neonatales. Pese a los avances que se han dado con la tecnología, las personas que las sufren pueden llegar a tener una vida larga, aunque con ciertas limitaciones. Hoy, miércoles, 14 de febrero, se celebra el Día Internacional de las Cardiopatías Congénitas. El cardiólogo y miembro del Instituto de Investigación Biomédica de Salamanca (IBSAL) Agustín Carlos Martín García habla con LA GACETA sobre su incidencia, los síntomas con los que se manifiestan, su diagnóstico, los tratamientos que existen o su pronóstico.

«El término 'cardiopatía congénita' se refiere a cualquier anomalía del corazón o de los grandes vasos -arterias aorta, pulmonar o sus ramas- que está presente desde el momento del nacimiento y es producida por alteraciones durante el desarrollo embrionario», asegura Agustín Carlos Martín, que asegura que los síntomas con los que se manifiestan estas patologías dependen de la complejidad de las mismas: «En general, más de la mitad son simples. Puede darse desde un defecto aislado en el tabique interauricular hasta algo complejo como una tetralogía de Fallot o una fisiología univentricular».

«Las estrategias para la investigación de la anatomía y la fisiología de las diferentes cardiopatías han evolucionado rápidamente, con preferencia por las técnicas no invasivas como el ecocardiograma, la resonancia magnética o la tomografía axial computarizada, a diferencia de los estudios invasivos», afirma Martín al ser preguntado por cómo se diagnostican estas patologías, que, gracias a los avances que se han dado en los últimos años en el ámbito de la medicina, pueden tratarse a día de hoy con anticoagulantes, lo cual ha hecho que el índice de supervivencia haya crecido, habiendo subido exponencialmente en los niños, que tienen más probabilidad de que, a lo largo de su vida, se curen llegando bien a la edad adulta.

«La mayoría de los pacientes a los que les hacemos un seguimiento en consulta tienen cardiopatías congénitas. Es fundamental que estas personas sean atendidas en centros de referencia como el nuestro porque han de recibir una asistencia sanitaria más específica», recalca.

Respecto al estilo de vida que tienen los pacientes que las sufren, este cardiólogo del Hospital de Salamanca afirma que el Complejo y, en especial, la unidad de Cardiología, velan para que puedan vivir de la forma más tranquila posible pese a que normalmente tienen que hacer frente a retos como la cirugía no cardiaca, el ejercicio, el deporte, la anticoncepción o el embarazo.

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