De la curación a salir de las listas del paro: en busca del 'milagro' del Rescatado

Detrás de cada persona que hoy se ponga frente a Jesús Rescatado habrá una promesa, una petición o un agradecimiento por el deseo cumplido. Generación tras generación, la devoción y la fama de la imagen se ha trasladado hasta nuestros días y se cristaliza en la celebración del besapiés donde más de 9.000 personas, según las previsiones de la congregación, se acercarán hasta la iglesia de San Pablo.

La llegada de la imagen de Jesús Rescatado a Salamanca se remonta al siglo XVIII cuando los trinitarios decidieron potenciar la devoción con imágenes similares a la que fue rescatada en Fez y posteriormente trasladada a Madrid. Desde 1390 ya estaban en Salamanca los Trinitarios. Aunque esta devoción se extendió por toda España, no fue hasta los años 30 cuando empezó una especial devoción hacia la imagen. Hay que tener en cuenta que desde la expulsión de los Trinitarios por la desamortización, en 1836, fue la congregación formada por laicos la encargada de mantener el culto lo que hizo que el culto también se extendiera mucho entre los feligreses salmantinos.

En Salamanca, la primera constancia documental que existe de la celebración del besapiés es en la posguerra a principios de los años 40, aunque también hay constancia de que se rezara cuando había catástrofes como en la temida gripe española o la presencia de hambrunas y plagas en el siglo XIX. No se conservan las actas durante la Guerra Civil. «La salud es el motivo principal por el que se acercan tantos fieles a Jesús Rescatado. Muchos acuden para que les ayude en la curación de su enfermedad y no fallan nunca para agradecer a Jesús los deseos cumplidos», explica Pedro Martín, exhermano mayor de Jesús Rescatado con la experiencia trasladada por su padre Tomás, uno de los referentes de la Congregación de Jesús Rescatado, ya fallecido. Pero no solo en el momento que se ha desarrollado una enfermedad o se ha recibido una mala noticia. Hoy es habitual ver a mujeres que están embarazadas en el besapiés y en los años posteriores acudir a la veneración junto a sus hijos. Esa generación se traslada a su vez, a sus hijos.

El trabajo y salir de las listas del paro suele ser otro de los motivos por el que se acude a pedir a Jesús Rescatado. «Precisamente, a mi padre Tomás le hicieron trabajador fijo en un primer viernes de marzo», recuerda. De hecho, según señala estas peticiones se dan mucho sobre todo durante los años de la crisis económica como ocurrió en la década de los 80 o la última crisis que acabó con miles de puestos de trabajo en el año 2012.

En los últimos tiempos y con la revitalización de la devoción entre los más jóvenes, también acuden universitarios, opositores e incluso adolescentes que se acercan a Jesús Rescatado para que les eche una mano en los exámenes o para sacar la plaza soñada. «Se pide su gracia, se besa a Jesús y se celebra la misa. Así es como actúan la mayoría de los que acuden. Hay que recordar que la devoción a Jesús Rescatado va más allá de la Semana Santa —sale por primera vez en el Santo Entierro en 1860 pero la imagen está en Salamanca desde el siglo XVIII—. De hecho, la congregación tiene cerca de medio millar de congregantes pero los fieles que se acercan a venerarle superaban antes de la pandemia las 10.000 personas.

La iglesia de San Pablo acogió en la tarde de ayer una oración para personas enfermas o con movilidad reducida para facilitar la accesibilidad a la imagen y evitar las demoras de la gran fila que se forma este primer viernes de marzo. En esta ocasión, esa tarde también se rezó por la salud del papa Francisco. Tras la celebración de la misa de medianoche, la parroquia de San Pablo se abrirá hoy a las siete de la mañana y habrá celebraciones de misas a las 8:00, 9:00, 10:00, 11:00, 12:00 y las 13:00 horas, y por la tarde, a las 17:00, 18:00, 19:00 y 20:00 horas, finalizando con un vía crucis a las 21:00 horas, al que está invitada la Junta de Semana Santa y las cofradías.

La parroquia de San Juan de Mata, de los padres Trinitarios, también acogerá un besapiés a la imagen del Nazareno que se iniciará con la apertura del templo entre las 8:00 horas y las 22:00 horas, con eucaristías a las 9:00, 12:00, 18:00 y 20:00 horas, para terminar con el rezo del vía crucis. A esta suelen acercarse los vecinos de San Bernardo y del colegio.