Los chinos en Salamanca se preparan para dar la bienvenida a la temporada de la serpiente

El Año Nuevo Chino está a la vuelta de la esquina y la comunidad china en Salamanca se prepara para recibir a la serpiente, animal que con su astucia y capacidad de transformación regirá el año. «Aquí la gente dice: las serpientes son malas porque dan miedo, pero en China no es así. Las serpientes son primas de los dragones, que son muy importantes para nosotros. Por eso decimos: es el año de la serpiente de oro», explica Chain Li, originaria del país asiático.

Tal como en mundo occidental, recibir el Año Nuevo es para los chinos un motivo de alegría. Un periodo para compartir en familia alrededor de una mesa llena de alimentos y una fecha en la que, cómo no, nunca faltan las tradiciones para atraer buena suerte. «En Año Nuevo siempre hay que vestir de rojo. El rojo es el color de la suerte en China», explica Sofía Chen, una china afincada en Salamanca, a la vez que explica que la importancia de este color en su país es tal que nunca hay suficiente rojo. «En Año Nuevo las casas y las ventanas se decoran de rojo, se usa ropa roja y se dan sobres de regalo rojos. Todo rojo», señala entre risas.

Además de vestir de este color, hay otras dos tradiciones que no pueden faltar entre los chinos en las vísperas del Año Nuevo: limpiar la casa a profundidad y pagar las deudas. Dos gestos que se realizan para dar paso a un año completamente libre de las malas energías que se pudieron acumular en el anterior.

Otra costumbre infaltable estos días es demostrar el cariño a las personas más cercanas con un detalle. Eso sí, siempre en efectivo. «En China casi nunca regalamos cosas porque no sabes lo que la persona quiere. Es mejor dinero. Cada familia tiene un sobre rojo con el nombre de la persona a la que va y antes de que termine el año vamos a las casas para echar dinero en los sobres. Se hace principalmente para los niños. Así el niño compra lo que quiere y aprende a ahorrar», relata Li Lu, dueña de un bazar chino.

Así, los chinos reciben el año con una buena cantidad de dinero extra en sus bolsillo, aunque para ellos las celebraciones no terminan con la llegada del nuevo año, sino que se extienden varios días. El primer día del año, una gran cantidad de personas evita comer carnes, para que no se mate animales esta fecha. El segundo día empiezan las correspondientes visitas a familiares y amigos. Primero se visita, en señal de respeto, a los padres, madres y abuelos. Luego a los hermanos y, por último, a los amigos para desearles un feliz año.

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