¿En qué consiste una boda charra? La tradición ancestral que llega hasta nuestros días

El concepto de boda charra dota de gran antigüedad, pero aún se sigue manifestando en nuestros días. Muchas personas desconocen el trasfondo de todos los rituales que el concepto de 'boda charra' oculta o conserva tras de sí.

Antes de toda boda, tiene lugar una pedida de mano. La tradición marca que una boda charra se debe de celebrar siempre en verano y en domingo. La pedida de mano suele hacerse con seis meses de anterioridad, en fechas próximas a Navidad.

El novio acudía con sus padres a casa de la novia, y exponía ante sus futuros suegros los motivos por los que quería conseguir el amor eterno y unirse en matrimonio con su hija. Tradicionalmente se llevaba un regalo a la familia de la novia, conocido como 'la entrega de la cesta', donde se negociaban los aspectos económicos de la boda. Quizás este último aspecto se haya visto modificado en la actualidad.

La hijuela es un documento que se redacta ante notario, donde se especifican los bienes que cada cónyuge aporta al matrimonio. Este documento debía de ser firmado por ambas partes contrayentes para poder celebrarse la boda.

Una de las curiosidades de estas bodas reside en el origen de cada uno de los novios. Si el varón era de fuera del municipio y la novia se quería mudar con él, se tenía que firmar un 'pijardo', que era el nombre que recibía un documento por el cual el varón se comprometía a pagar una cuantía a cambio de llevarse a la novia fuera de su lugar de origen.

Tres semanas exactas antes de la boda se realizaban las amonestaciones, donde se exponía públicamente los nombres de las personas que se iban a casar, y si alguien mostraba algún impedimento, era en ese momento desde la iglesia donde tenía que decirlo.

Una semana antes, los mozos y las mozas del pueblo donde tenía lugar la boda, recorrían las calles del pueblo anunciando la celebración de un nuevo matrimonio.

Las mozas del pueblo acudían a la casa de los novios para hacerles la cama unos días antes de la fecha del enlace, y se debía de correr el «choto enamorado», un pequeño encierro que posteriormente era sacrificado para formar parte del menú de la boda.

El día de antes de la boda los mozos preparaban las mesas del banquete, mientras que las mozas decoraban la iglesia y las mesas del comedor.

Los novios debían salir cada uno de su respectiva casa junto a sus padrinos de boda, el varón agarrado del brazo de su madrina, y la mujer agarrada del brazo del padrino. Ambos se dirigían andando hasta la iglesia, rodeados den una comitiva de vecinos, amigos y demás conocidos del municipio, a diferencia de las bodas actuales donde los novios van en coches y carruajes.

Al llegar a la iglesia, el novio tocaba la puerta para que el párroco saliera a recibirle. Es en esta ubicación donde los novios se daban el 'sí quiero' y se enlazaban las alianzas. Una vez realizado el acto canónico avanzaban de la mano caminaban hacia el altar cubiertos por velambres mientras portaban una vela encendida en símbolo de enlace matrimonial.

Una vez acabada la ceremonia, todos salían en dirección al lugar del banquete, que generalmente correspondía a la casa del novio.

La fiesta comenzaba cuando el novio, ya convertido en esposo, se quitaba el sombrero.Tras él, la mujer se despojaba de su mantilla y se ponían el serenero (pañuelo facial), el lazo, la faltriquera (bolsa pequeña que se ata a la cintura bajo la falda) y la cinta del mozo.

El más tradicional de una boda charra estaba conformado por una sopa de pan y huevo, un cocido y un arroz con leche.

Tras el banquete se realizaba la ofrenda del tálamo, una exposición pública de los regaos que se otorgaban a los recién casados. En este momento se iniciaba el baile de las prendas, al que seguía el baile inaugural de los novios. La fiesta duraba hasta por la noche, con su tradicional y cortés cena.

El lunes después de la boda, conocido como 'lunes de boda' se preparaba una comida a los novios que consistía en un plato de patatas con carne, denominado 'calderillo'.

Actualmente hay pocas parejas que se casen mediante la tradicional boda charra, y alguno de sus elementos ya no se llevan a ejecutar debido a la gran dificultad que supone en las grandes ciudades y la vida actual. Sin embargo, la esencia de la boda charra siempre vivirá, porque la tradición y la cultura es lo que hace bella a una tierra.

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