Los autobuses de Salamanca recuperan a sus viajeros más de tres años después

El autobús urbano de Salamanca recuperó la actividad previa a la pandemia en junio, tres años y tres meses después de que los contagios de la covid-19 condicionaran la actividad de los ciudadanos. El servicio acabó el mes pasado con 1.065.835 viajeros, lo que supone el 98,24% de los que utilizaron el transporte público en el año 2019. Detrás de este incremento se encuentran dos factores. Por un lado, la incorporación de las nuevas líneas 14 y 15, que comenzaron a operar desde el 1 de junio y que sumaron entre ambas 22.195 usuarios y, por otro lado, la retirada de las mascarillas en el mes de febrero, momento en el que el incremento de los viajeros comenzó a despegar. Así lo pone de relieve el concejal de Fomento, Fernando Carabias, satisfecho por el impulso del servicio municipal. «La gente adquiere confianza a la hora de viajar y tampoco se pierden aquellos usuarios que desisten en el último momento por no tener tapabocas», detalla.

En cambio, la rebaja del precio por las sucesivas bonificaciones no ha tenido mayor repercusión en la afluencia de viajeros, dado que los descuentos se aplican a los abonos y las cifras son similares a las de antes de ampliar la medida. Por primera vez la actividad del servicio de transporte público regresa a cotas previas a la covid, aunque en el mes de marzo estuvo muy cerca, al llegar a un 96,41% de los usuarios de 2019. En enero, en cambio, el número de viajeros todavía estaba un 17% por debajo de los que se registraron en el primer mes de 2019.

«La tendencia en todas las ciudades es a recuperar las cifras pre-pandemia. Durante el año pasado fuimos subiendo la actividad mes a mes y durante este ejercicio esperamos que la tendencia siga al alza», confiesa el concejal de Fomento, que acogió con sorpresa la recuperación prácticamente total de pasajeros en junio. Defiende, no obstante, el buen servicio que se presta en Salamanca, «un transporte limpio, barato y con una frecuencia máxima de 20 minutos, algo que está muy bien». Se trata de aspectos que ya se valoraban antes de la pandemia, de hecho durante el año 2019 el servicio de autobús alcanzó su récord histórico de 13,6 millones de usuarios, cota que Carabias confía superar al acabar este año 2023.

Sobre el primer mes de actividad de las nuevas líneas 14 y 15 cabe destacar que han recibido de media 444 y 295 pasajeros al día, respectivamente. Comenzaron a operar el mismo 1 de junio, cuando entró en vigor el nuevo contrato. La línea 14 ha sido la más demandada hasta ahora, con un total de 13.325 usuarios durante su primer mes. Conecta el barrio del Zurguén con Huerta Otea pasando por el Hospital, cumpliendo con una demanda de ambos barrios ya que, al circular por San Vicente, también acerca a los vecinos al centro. En cuanto a la línea 15, entre el 1 y el 30 de junio registró 8.870 viajeros, un recorrido que une Pizarrales con el Hospital a través de la carretera de Ledesma, la avenida Portugal y Filiberto Villalobos. «Estoy seguro de que durante el mes de julio ambas conexiones se utilizarán mucho más y dejarán de ser las hermanas pobres del servicio, aumentando aún más cuando comience la actividad en los colegios y en las universidades», confía Carabias.

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