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Un proyecto que minimiza costes, reduce el mantenimiento y no rompe con el entorno. Esta es la propuesta que ha presentado en la mañana de este miércoles el Grupo Municipal Vox para la instalación de un ascensor en las escaleras de la Gran Vía.
Para mantener la imagen, el elevador estaría recubierto en la parte de abajo de un zócalo de granito, a la misma altura que los arcos de los soportales, y en la zona alta, de piedra de Villamayor.
Se suma una pasarela que comunicaría la salida del ascensor con la primera plataforma de las escaleras, mejorando la accesibilidad de la zona.
«¿Para qué se necesita un ascensor panorámico? ¿Para ver a una altura de tres metros los autobuses de la Gran Vía?», se ha preguntado el portavoz del Grupo, Ignacio Rivas, durante la presentación.
Considera que un elevador de este tipo sería más costoso y las vistas no compensarían el gasto, entre el que se incluiría el de la limpieza de los cristales.
La entrada al ascensor sería lateral, para que las personas que esperan no se acumulen en la acera, y se mantendrían las balaustradas de la escalera.
«Nos encantaría que el Equipo de Gobierno incorporara la propuesta de Vox y estaríamos abiertos a que se plantearan otras», ha señalado Rivas, ya que el partido propone que se convoque un concurso de ideas.
«Confiamos que lo tengan en cuenta, pero atendiendo a la realidad, las expectativas no son altas», añadió el concejal.
Por otro lado, en relación a la propuesta del Grupo Municipal Socialista de imponer una tasa de 3 euros por persona y día que pernocte en las viviendas de uso turístico, al portavoz de Vox «se le hace difícil» su ejecución. «Si alguien viene a Salamanca a dar negocio si le cobramos es como castigarles».
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