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Entre brochazo y brochazo, acordes y ‘clics’. Cualquiera que acuda a la sala de exposiciones Unamuno podrá ser testigo de primera mano de la importancia que está cobrando el arte en Castilla y León y, en especial, en Salamanca con iniciativas como la muestra que se podrá ver hasta el 17 de noviembre en este espacio, formada por 45 creaciones de jóvenes de entre 16 y 30 años, las cuales han sido elegidas por el jurado que conforma el certamen del programa ‘Arte Joven: Jóvenes Artistas de Castilla y León’, convocado por el Instituto de la Juventud, dependiente de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades de Castilla y León.
En esta exposición, titulada ‘Art on the road’, se han elegido como ganadoras nueve de las obras presentadas, entre las que han destacado piezas en blanco y negro, hechas sobre papel de seda, en acrílico, sobre lienzo, en fieltro o en formato de video art.
Entre los galardonados, Rocío Torío, una cantante vallisoletana de 28 años, ha conseguido alzar el primer premio en la categoría de música con ‘Vuela alto’, un tema que ‘cocinó’ en plena pandemia y que habla sobre la importancia de la autoayuda. Esta entrega, que ha encandilado por completo a los miembros del jurado que han elegido a todos los premiados, está dentro del género musical que más frecuenta esta castellanoleonesa, con tintes de soul, funk y latin jazz.
“La mayoría de los temas que he sacado los he hecho para ayudarme a mí misma. La primera vez que gané en el certamen fue en 2020, con mi banda, ‘De perdidos al trío’, con la que presentamos ‘No puedes llevártelo’. Aquello fue un verdadero impulso porque nos proclamaron ganadores en plena pandemia, justo cuando estábamos con las mascarillas y la cultura pasó por un momento tan delicado”, asegura Rocío Torío, ganadora por segunda vez dentro de este programa en el que se ensalza la importancia de darle visibilidad al arte local.
Sobre la cabida que tienen las obras que salen de las ciudades pequeñas y que no han llegado a hacerse un hueco en el ámbito nacional, esta vallisoletana lo tiene claro: el arte local y, en este caso, la música, puede gozar de muchísima más visibilidad. “Las autoridades de las distintas ciudades tienen que conocer a los artistas que tienen y, si es música, tienen que escucharles. De esta forma, no seremos tan ‘comodín’ como lo somos ahora”, recalca Rocío Torío, que, en la presentación de la muestra, llevada a cabo ayer, embelesó al público presente con su guitarra.
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