16 alfileres en el estómago de Bruno por un caso de salchichas ‘mortales’ en Salamanca

El tradicional paseo matutino que Daniel Sanz hace junto a su perro Bruno se vio truncado por una trampa escondida en el asfalto en la calle Nueva Guinea. Una salchicha rellena de alfileres realizada con precisión para que no sobresalga ninguna de las puntas. Sin pensárselo, Bruno la engulló de un bocado. “Cogió algo con forma de salchicha y al lado había otras. Cuando lo abrí y estaba lleno de alfileres me llevé las manos a la cabeza y me fui corriendo para llamar al veterinario que nos atendiera de Urgencias”, detalla este joven sobre el incidente que ayer denunció ante la Policía Local.

De su clínica habitual fue derivado a una más específica para que le hicieran una intervención de emergencia que incluyó una ecografía para sacar los trozos de salchichas y los alfileres. “El veterinario sacó en la endoscopia 16 del estómago y uno que tenía clavado en la garganta. La suerte es que no masticó y se las tragó enteras porque sino podía no haber sobrevivido”, explica. Las salchichas que estaban junto a las que se tragó Bruno tenían como mucho un par de alfileres. Cuando vio los 16 que extraía el veterinario el susto fue triple. “Pensaba que como mucho tendría tres, cuando observamos que eran 16 el susto era tremendo”. Tras la intervención, el Golden Retriever, raza de la mascota, ya descansa en casa aunque el temor no se les ha pasado. La factura de los tratamientos de urgencia ha superado los 600 euros. “No me explico porque lo hacen. El que lo haga baja de madrugada cuando nadie lo ve”, lamenta aún sorprendido.

A los que puedan verse afectados por esta incidencia, Sanz también recomienda “que no se haga vomitar al perro, ni se le dé nada de comer”. “Deben ir directamente al veterinario ya que si hacen fuerza con el estómago puede ser aún peor”, traslada.

Ante estos hechos, la recién creada Oficina de Bienestar Animal del Ayuntamiento de Salamanca, de la que es responsable la concejala de Familia e Igualdad de Oportunidades, Ana Suárez, inició ete jueves una investigación, a través de la Policía Local, para esclarecer las causas del caso de trampas para perros encontrada en la ciudad.

Según señaló Suárez “se trata de un caso puntual, pero implica un acto de maltrato que no vamos a permitir”. “Desde la Oficina de Bienestar Animal trabajaremos sin descanso contra todos los actos de maltrato animal que se produzcan la ciudad. Además, los culpables serán puestos en manos de la justicia”, incidió.

El suceso se produjo en la mañana del miércoles con la aparición, en las calles Nueva Zelanda y Sumatra de la zona de Puente Ladrillo, de salchichas con alfileres, que de ser ingeridas por los perros les podría generar graves problemas. Tras la denuncia y una vez que la Policía Local se ha hecho cargo de la investigación, el Ayuntamiento pide tranquilidad a todas las personas que sean dueños de un perro, además de indicarles que en caso de encontrar alguna sospecha de trampas se avise inmediatamente a la Policía Local.

El problema de los ataques a los perros no es nuevo y causa gran preocupación entre los amantes de las mascotas. Hace dos años se utilizó el método de la carne envenenada o en mal estado. En esa ocasión ocurrió en la plaza de Coimbra, situada en la zona del Teso de la Feria de la capital charra. Fue un vecino de este barrio el que dio la voz de alarma después de pasear por allí con su perro. Al menos un can resultó intoxicado por esta acción.