Villoria y Cantalpino, siguen sin poder consumir agua del grifo

Los vecinos de Cantalpino llevan más de seis meses sin poder beber agua del grifo de sus casas por la presencia de metolacloro en un nivel «ligeramente superior a lo que la legislación considera apta». Así lo daba a conocer un anuncio publicado por el Ayuntamiento en el pasado mes de mayo. En Villoria, tampoco se puede consumir agua corriente ni cocinar con ella, según dio a conocer por bando el Ayuntamiento con fecha, 23 de septiembre. Ambos alcaldes coinciden en señalar que los niveles son «ligeramente superiores» y buscan fórmulas para que los análisis permitan poder hacer uso del agua con el que suministra cada Consistorio a sus vecinos.

Esta problemática se repite en cada uno de estos municipios año tras año. En Villoria, vienen sufriendo de este mal desde el año 2008 y, desde entonces, en el Ayuntamiento, no han cesado de buscar soluciones y gastar importantes cantidades de dinero. El alcalde, Alex González Hidalgo, confía que la nueva planta de osmosis inversa será la solución. No obstante, también trabajan para ofrecer una opción a corto plazo. Por ejemplo, esta semana, limpiarán los depósitos y realizarán los análisis de nuevo porque plantean la posibilidad de que haya acumulación de arenas con nitratos y arsénico en los depósitos. Sospechan esto porque han detectado que, en los análisis realizados en los grifos del pueblo, se detectan más nitratos que en el sondeo.

Según los análisis realizados por Sanidad, el nivel de nitratos en el sondeo es de 50 mg/l y el de Aqualia es de 52,4. El nivel de nitratos tomado por Sanidad en los grifos es de 60 mg/l. Aqualia solo toma muestras en el sondeo. Por su parte, el alcalde de Cantalpino tiene la esperanza de que, en breve, los resultados sean aptos para consumo porque el problema es de un producto fitosanitario que no se prevé que se vuelva a aplicar a los cultivos hasta la primavera.