Otro pueblo de Salamanca que ofrece un bar gratuito

Valdelacasa ha sido una de las últimas localidades en sumarse a los pueblos de Salamanca en quedarse sin bar, un problema cada vez más extendido, y se ha puesto manos a la obra para solucionarlo lo antes posible ofreciendo unas instalaciones municipales de forma gratuita.

Según se ha sabido esta semana, la corporación municipal que preside Juan Ramos, ha anunciado la cesión totalmente gratuita del bar municipal con la idea de que alguien se haga cargo del negocio y los vecinos puedan tener un lugar de encuentro. No habrá que pagar ninguna renta, sólo los gastos corrientes de luz, agua y los servicios que a mayores quiera instalar el adjudicatario. El objetivo del Ayuntamiento es entregarlo recién pintado.

Según se recoge en la promoción realizada, se trata de un edificio de dos pisos. En la primera planta se encuentra el negocio de bar con barra y mesas y, adyacente, un salón que puede servir como comedor, en el caso de que se quieren dar comidas, y un almacén. En la planta alta se encuentra la cocina, un comedor, una terraza amplia, los servicios (también hay en la planta baja) y tres habitaciones por lo que también puede servir de vivienda para quien quiera hacerse cargo del negocio en caso de que sea de fuera. En total, las instalaciones ocupan una superficie de 180 metros cuadrados (90 metros en cada planta) y se encuentran en una buena ubicación dado que está en el acceso principal al pueblo por la carretera de Guijuelo-Cristóbal y muy cerca de la villa chacinera y de otras localidades como Ledrada.

Las instalaciones cerraron después de las fiestas navideñas y el objetivo del Ayuntamiento es el de poder tener el bar listo para adjudicarlo a finales de mes. Y es que, como este viernes señalaba el alcalde, Juan Ramos, a LA GACETA, además de la pintura exterior, que tendrá que hacerse cuando mejoren las condiciones climatológicas, se quiere llevar a cabo en estos días de enero una limpieza interior y alguna reparación que sea necesaria. «Ya tenemos varios interesados y han llamado tanto de la zona como de fuera, hasta de Zaragoza. La idea es tenerlo a finales de mes», señalaba el regidor.

«Nosotros, con que de servicio al pueblo, nos basta», señalaba el regidor. Y es que el cierre paulatino de los bares en los pueblos se ha visto como un grave problema para las relaciones sociales entre los vecinos hasta el punto de que las administraciones públicas comienzan a ver estos establecimientos como un servicio social y empiezan a preparar subvenciones y ayudas para su mantenimiento o su apertura en los casos donde no los haya. De hecho, Juan Ramos piensa también en las ayudas anunciadas por la Diputación y espera poder acogerse a ellas una vez que se pueda hacer efectiva la convocatoria.

En los últimos años el único bar de Valdelacasa que funcionaba era el municipal, una situación común en numerosas localidades del entorno, como Valverde de Valdelacasa o Peromingo, donde los servicios hosteleros que hay son también centros de titularidad municipal. También lo es Monleón, donde el Ayuntamiento consiguió abrir el antiguo corral del toro como establecimiento hostelero con el bar a coste cero y el empadronamiento como única condición.

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