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Domingo, 7 de agosto 2022, 21:29
La fiesta no para ni un minuto en la pequeña localidad de Peralejos de Abajo, que este domingo ha alcanzado el ecuador de sus celebraciones veraniegas con una jornada dedicada a la afición taurino.
Este domingo, tras la misa dominical, los vecinos, entre los que se encontraba el propio alcalde, Alfonso Castilla, se han afeado en tener todo preparado para el primero de los festejos taurinos del día, cerrando las bocacalles desde la Plaza Mayor hasta la iglesia con vallados y remolques de tractor.
Finalizados los trabajos y revisado el recorrido se dio suelta a la primera de las tres eralas de la ganadería de Rollanejo, propiedad del Ayuntamiento de El Cubo de Don Sancho, que cumplió con creces las expectativas tanto de público como de corredores. Unas vaquillas que hicieron las delicias de todos los asistentes llegados desde todos los puntos de la comarca de Vitigudino.
Carreras, sustos y recortes que se prolongaron durante más de hora y media, el tiempo que estuvieron en las calles de Peralejos de Abajo cada una de las tres eralas de Rollanejo.
El intenso calor no fue óbice para que una vez finalizado el festejo taurino la animación continuara entre las familias y grupos de amigos y peñas festivas que comentaron el buen resultado del espectáculo musical ofrecido la madrugada por “El Suso” y la fiesta de verano y disco “Vilvaldi” que se prolongó hasta la llegada de las primeras luces del día.
La jornada en la que se alcanzó el ecuador de las fiestas de verano de Peralejos de Abajo continuó a las seis y media de la tarde con un segundo encierro urbano, en este caso de dos añojos y una vaca de la misma ganadería de Rollanejo, protagonista de la sesión matinal.
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