El segundo de los encierros tradicionales con caballos del ciclo de San Bartolo en Aldeadávila de la Ribera ha estado protagonizado por el susto vivido en la entrada misma de la plaza cuando un mozo fue embestido consecutivamente por dos de los astados del festejo aunque en principio el percance no ha tenido consecuencias graves.
La jornada arrancó con el tradicional «apartao» de los toros en el «prao rocoso» para posteriormente recomponer los cuerpos con los chupitos en el matadero viejo al tiempo que la música de la charanga «La Escala 2.0» cual flautista de Hamelín fue llevando al grueso de las peñas hacia la plaza.
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Un segundo encierro con caballos que sigue la tónica habitual de los festejos taurinos populares de Aldeadávila de la Ribera, puntual y con rápidas carreras que finalizaron en la plaza donde justo debajo del callejón de entrada uno de los mozos se vio sorprendido por la velocidad de los de Valrubio, alcanzándole el que abría la manada, que lo mandó al suelo donde fue arrollado por el segundo del lote. Dos embestidas de las que el corredor pudo salir por su propio pie para buscar refugio en los alares de la plaza.
Tras el susto, la fiesta taurina continuó en Aldeadávila de la Ribera con la suelta de una vaquilla en popular capea en la plaza, cerrando la mañana el habitual desayuno de churros con chocolate tan agradecido sobre todo por aquellos, muchos, que han pasado la noche de celebración.
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