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Torresmenudas, una grata sorpresa a un paso de la capital

La localidad está poniendo al día tanto sus espacios medioambientales emblemáticos como los edificios públicos y las infraestructuras deportivas

Domingo, 5 de junio 2022, 00:09

Disfrutar de la naturaleza y la tranquilidad de la vida en un municipio que ronda los doscientos vecinos es posible a un paso de la capital salmantina en el municipio de Torresmenudas.

El Consistorio, poco a poco, como apunta su regidor, Hilario Hernández, trabaja para “poner al día”, todas las infraestructuras públicas que vecinos y visitantes requieran.

Así, una de las ultimas actuaciones que se han desarrollado tiene que ver con la adecuación del frontón municipal para que se transforme e una zona deportiva de usos múltiples, adaptando así este recinto a los requerimientos y gustos más actuales.

Justamente en estas semanas acaba de terminar la actuación que supone renovar el pavimento de esta pista deportiva y ahora llega el tiempo para poder delimitar los distintos espacios de juego que acogerán, por ejemplo, desde una pista de fútbol 7 hasta tenis, etc.

Otras actuaciones que también repercuten en la calidad de vida de los vecinos, veraneantes y visitantes de la localidad tiene que ver con la renovación de las canalizaciones de agua potable y con otra actuación mucho más visible que se ha completado en las últimas semanas, como es la limpieza del regato que discurre por la localidad.

Del anchísimo cauce de la corriente de agua se han retirado tanto los restos de árboles y ramas que habían llegado con los distintos aluviones de agua, como la maleza que había crecido en el entorno.

Esta actuación ha permitido sanear la zona de manera que ahora se puede pasear por un bosquete que hay en la zona y también conocer desde otro punto de vista el espacio de humedal que acoge el municipio, con un acceso sencillo y adecuado, pero que a la vez respeta el entorno verde en el que se encuentra este rincón, uno de los más frescos del municipio.

El adecentamiento y puesta al día de los espacios públicos también incluye uno de los edificios más emblemático como es la Casa Consistorial.

A lo largo de este mes está previsto que la imagen del Ayuntamiento quede renovada, puesto que se ha considerado desde el Consistorio que el edificio presentaba un importante grado de deterioro en la pintura, de manera que se va a corregir ese aspecto con un tratamiento de renovación que permita unificar de nuevo los tonos blanco y albero que luce la Casa Consistorial como identificación.

Para aquellos que vayan a decantarse por visitar el municipio, las jornadas de primavera son ideales para hacer escapadas a la naturaleza y contemplar los campos en flor.

Torresmenudas ofrece eso a escasa distancia de la capital. De hecho, los paisajes son uno de los grandes atractivos de la localidad en estas fechas, en las que los paseos por el monte ofrecen bellas estampas con la jara en flor.

Por otra parte, la cantidad de senderos con los que cuenta permiten disfrutar de la natural y del turismo rural. En cuanto a sus símbolos más destacados es imprescindible conocer su iglesia, de estilo románico, así como la fuente de Val de la Ermita, ambos son punto de encuentro de vecinos y de curiosos. Junto a este patrimonio natural y arquitectónico Torresmenudas aúna historia y leyendas, como la que se refiere a la historia del municipio. De hecho, el lugar original del pueblo parece ser que estuvo ubicado en el paraje del Valle de la Ermita.

A lo largo del término municipal están presentes distintos vestigios arqueológicos que denotan que estuvo poblado desde tiempos ancestrales, siendo el de más relevancia un poblado datado de la edad del bronce y que se encuentra en el paraje denominado Teso del Cuerno, limítrofe entre los términos de Torresmenudas y Forfoleda.

Sin embargo, su actual nombre proviene de la época de la Reconquista, entre los siglos XI y XII, cuando los cristianos comenzaron a avanzar frente al retroceso de las fuerzas musulmanas.

Al parecer, en esta época Torresmenudas era utilizado como una segunda línea de defensa de la capital salmantina y en su municipio se situaban diferentes torres, almenas y atalayas, todas ellas sencillas, sin ser de grandes dimensiones, de ahí el nombre de Torresmudas.

Otros parajes del municipio también apoyan esta teoría, por ejemplo, la Atalaya Grande y la Atalaya Chica, los dos puntos de mayor altura de la localidad.

Contenido patrocinado por el Ayuntamiento de Torresmenudas

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