Santa Teresa medía 1,56 y su brazo derecho estaba sobrecargado de tanto escribir

El equipo médico científico italiano, que ha trabajado desde hace seis meses en el análisis de los restos de Santa Teresa de Jesús, ha entregado a la Orden del Carmelo Descalzo un documento preliminar de 53 páginas, del que se ofrece una síntesis divulgativa realizada por el profesor Luigi Capasso. En la finalización del proyecto iniciado en Alba de Tormes el 28 de agosto de 2024, el equipo médico – científico realizará una publicación conclusiva en el Comité Científico Internacional.

El documento preliminar y la síntesis originales en italiano se encuentran depositadas en el los archivos de la Casa General del Carmelo Descalzo, en Roma, y del monasterio de la Anunciación de Nuestra Señora del Carmen, de las Madres Carmelitas Descalzas de Alba de Tormes. Está firmado por el profesor Luigi Capaso en Chieti, Italia, el 15 marzo 2025.

Los restos mortales de Santa Teresa de Jesús se conservan en lugares diferentes. El equipo científico ha tenido la oportunidad de examinar los siguientes: En la Basílica de la Anunciación de Nuestra Señora del Carmen, en Alba de Tormes, se conserva el cuerpo en la preciosa urna de plata y el brazo izquierdo y el corazón en dos relicarios separados.

En el Convento de la Merced, de las Madres Carmelitas Descalzas de Ronda, Málaga, se conserva la mano izquierda.

En la iglesia de Santa Maria della Scala, en Roma, se conserva el pie derecho.

Todas las reliquias examinadas están momificadas. El estado de conservación es extraordinario: el pie derecho, la mano izquierda, el corazón y el brazo izquierdo están perfectamente conservados, con la piel intacta, con tejidos subcutáneos y masas musculares bien conservadas, con huesos en conexión anatómica y sin signos de degradación.

El cuerpo tiene áreas descubiertas de ropa, es decir, la cara y el pie izquierdo, excelentemente conservadas, mientras que las partes cubiertas por la ropa muestran la conservación de los tejidos ya momificados en siglos pasados.

Los análisis que hemos realizado, también con métodos químicos y con métodos micromorfológicos de microscopio electrónico de barrido, excluyen la presencia de microorganismos contaminantes activos; esto demuestra que los tejidos orgánicos del cuerpo están actualmente estabilizados, no contaminados, y que el lugar de conservación es adecuado, no húmedo, como también lo demuestran nuestras mediciones microclimáticas.

Gracias a la detallada documentación científica llevada a cabo con motivo del actual reconocimiento, se ha procedido a la desinfección tanto del interior de la preciosa urna de plata como de los tejidos momificados del cuerpo de la Santa, para destruir cualquier actividad residual de insectos o microorganismos anteriores. Además, se ha procedido a consolidar los tejidos momificados del cuerpo, con el fin de bloquear cualquier degradación actual y futura, tanto mecánica como biológica.

El estado de perfecta conservación de los tejidos blandos de la cara es realmente extraordinario: por ejemplo, se conserva el cuero cabelludo, con todavía muchos rastros de pelo que son de color castaño.

Según el informe de los científicos, los análisis químicos permiten descartar que se haya implementado un proceso de momificación artificial, tanto en el caso del cuerpo como en el caso de cada una de las otras partes conservadas por separado. Esto hace que el fenómeno de la momificación, especialmente el del brazo izquierdo, el pie derecho y la cara, sea un fenómeno natural verdaderamente excepcional, con una perfecta conservación de todos los tejidos blandos. Solo en el corazón hemos encontrado la presencia de eflorescencias inorgánicas que podrían estar relacionadas con productos químicos utilizados en su conservación inicial.

En general, los restos examinados son los de una mujer con una estructura esquelética pequeña, con masas musculares frágiles y con un panículo subcutáneo adiposo pobre. La altura en vida, reconstruida por cálculos antropométricos, ha resultado ser de unos 156,8 centímetros. La radiografía del brazo derecho muestra una patología del punto de inserción del músculo flexor profundo de los dedos en la parte superior del cúbito. En términos técnicos «entesopatía por sobrecarga». Esta lesión también está de acuerdo con la historia personal de la Santa, con especial atención a su hábito de escribir, acción que involucraba directa y continuamente al mencionado músculo externo de la mano derecha.

El próximo día 28 se desvelará por la mañana el verdadero rostro de Santa Teresa, reconstruido tal como era cuando tenía cincuenta años, una cara que ha sido reconstruida con técnicas actuales.

La reconstrucción del rostro se ha llevado a cabo en el Victorian Institute of Forensic Medicine (Monash University, Victoria, Australia), aplicando una combinación de metodologías forenses actualmente en uso en Estados Unidos y Reino Unido y basadas en los datos antropométricos y en las radiografías que se han realizado con motivo del actual reconocimiento científico.

• Temas
• Australia
• Roma
• Alba de Tormes
• Reino Unido
• Italia
• Estados Unidos
• Banco Santander