Santa Marta, la localidad salmantina que más perderá por la sentencia de la plusvalía

La decisión del Tribunal Constitucional de declarar nulos los artículos que regulan el denominado impuesto de plusvalía ha hecho daño a ayuntamientos que contaban con unos ingresos que ahora ven peligrar.

En Santa Marta, que el pasado año contó con 481.000 euros de ingresos por este concepto, su alcalde, David Mingo reclama “seguridad jurídica para poder hacer los presupuestos del año entrante, porque esta cantidad en

Santa Marta es el equivalente a las inversiones anuales. Que se cree un fondo, o se den las instrucciones a Hacienda para garantizar que llegarán ingresos como estaban llegando”. El municipio ha presupuestado en los últimos años 330.000 euros anuales por este concepto, pero los ingresos netos reales han sido más altos, oscilando entre los 344.000 y los 621.000 euros en los últimos 4 años.

Carbajosa de la Sagrada, con 250.000 euros es el segundo en montante económico. Terradillos con 15.000, Carrascal de Barregas con 14.000 y Villamayor con 10.000 euros son los que apuntan cifras más destacadas.

“Es un duro golpe para las arcas municipales que tendrá que ser suplido por parte del Gobierno central de alguna manera”, destacó el alcalde de Ciudad Rodrigo, Marcos Iglesias. Una localidad que viene recaudando anualmente en torno a 170.000 euros por el impuesto de sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana.

En menor medida, la supresión del impuesto de plusvalías afecta a localidades como La Fuente de San Esteban, donde los ingresos alcanzan entre los siete y ocho mil euros anuales; Fuentes de Oñoro, donde esta cifra no supera los 3.000 euros, además de Vitigudino y La Alberca, municipio este último donde “el cobro de este impuesto estaba congelado desde hace tiempo a la espera de la resolución del Tribunal”, aseguró ayer el alcalde, Miguel Ángel Luengo, “aunque se trata de unos ingresos de muy escasa entidad”.

La ciudad de Béjar dispone de una ordenanza propia sobre el impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana, conocido vulgarmente como plusvalía. Los presupuestos aprobados para este año fijan la cantidad de ingresos en 120.000 euros y el concejal de Hacienda, José Luis Rodríguez, eleva esa cifra hasta los 150.000 euros para el ejercicio 2022. Además, afirmó ayer que “en Béjar, el Ayuntamiento va presupuestando según la media de los últimos años porque es la tercera sentencia sobre este tema” y añade que “la recaudación prevista la hemos ido disminuyendo en los últimos presupuestos”.

En Guijuelo, la Plusvalía se regula a través de la Ordenanza Fiscal número 4 “Reguladora del impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana” y el Consistorio sufrirá también una merma en sus ingresos. Según explica el alcalde, Roberto Martín, se estima que el Ayuntamiento dejará de percibir en torno a 121.000 euros de media anual.

El Ayuntamiento de Peñaranda percibió en el último ejercicio económico 75.000 euros en concepto de plusvalías, de los que 50.000 euros ya se han cobrado y los 25.000 restantes están pendientes del segundo plazo de pago en Regtsa. Desde el Ayuntamiento se confía en que el Ministerio de Hacienda adopte finalmente alguna fórmula o tipo de compensación para que los consistorios no pierdan dichos ingresos.

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