Roban 40 figuras de un belén de Béjar escondidas en los abrigos

No es la primera vez que el gran belén ubicado en el sotocoro de la iglesia de El Salvador de Béjar es el objetivo de personas amigas de lo ajeno, pero, en esta ocasión, las figuras sustraídas tienen más valor sentimental que económico.

Eduardo Soria es el autor del nacimiento, que contaba con 450 figuras y unos 80 metros cuadrados de superficie. Fue el pasado fin de semana cuando tres personas entraron en la iglesia aprovechando al trasiego de gente tras la misa de la una del mediodía y cogieron las figuras que más les llamaron la atención, algunas de ellas de gran tamaño.

Escondidas en la espalda y cubiertas por el abrigo, las personas que realizaron el robo salieron a la calle entre los feligreses, pero no se dieron cuenta de que las cámaras de seguridad del templo habían cumplido su función y dejaron constancia de su fechoría, así como de sus caras.

Eduardo Soria decidió denunciar los hechos ante la Policía para esclarecer el robo y en esta tarea se encuentran los agentes, que ya tienen una idea bastante acertada de quiénes son las personas implicas en el hurto. Horas después, realizó una valoración de las figuras sustraídas de unos 850 euros, pero lamentó, sobre todo, que algunas de ellas fueron talladas por su padre, que falleció hace más de tres meses.

Faltaron figuras como el San José de la escena de los desposorios de la Virgen, piezas del taller de alfarería, algunos detalles de las figuras, los décimos de la lotera, las alfombras de un puesto de venta, figuras de gallos de Portugal y una larga lista hasta completar casi el medio centenar de piezas y figuras. Además, causaron algunos daños en las escenas creadas por Eduardo Soria con gran esmero y que, de hecho, le ha servido para ser el belén ganador del concurso del circuito belenístico de la Vía de la Plata.

Eduardo Soria explica que, en ediciones anteriores, se han producido robos “a los que no doy importancia” de figuras como alguna oveja y un cántaro de barro, pero este otro hurto ha querido denunciarlo porque “por ejemplo, al robar la figura de San José en los desposorios me va a tocar comprar toda la escena de nuevo”.

El anterior robo fue en enero de 2018cuando se llevaron a mediodía al Niño Jesús, seis ovejas y seis gallinas de ese mismo belén, con un valor estimado de entre 150 y 200 euros.

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