El pueblo donde está en venta un convento valorado en 3 millones de euros

Desde que en septiembre de 2017 las tres últimas Madres Carmelitas dejaron el convento que la orden tenía en la localidad de Ledesma el inmueble y sus parcelas, alguna de más de 4.000 metros cuadrados, están vacíos y en venta.

«La tasación que se hizo en ese momento era de 3 millones de euros», señalaba la presidenta de la Federación de San José de las Madres Carmelitas Descalzas, Elsa Campa, «a lo largo del tiempo nos han ido llegando ofertas, pero no se pueden regalar los bienes de la comunidad. Hace poco, por ejemplo, una persona nos ofrecía 200.000 euros, que no es una cantidad que se acerque al valor del inmueble».

En redes sociales y un portal inmobiliario incluso hay una propuesta de venta que ronda los 600.000 euros. «No sabemos de dónde ha salido esa cifra, ni quién la ha puesto, pero no es realista», indicó la presidenta de la federación de religiosas, «sólo la finca ya está valorada en muchísimo más dinero y en ella hay gente que nos ha llamado interesada porque se podrían construir viviendas sociales, un bloque de pisos e incluso chalets».

Las gestiones que se llevan a cabo para una futura venta del convento se realizan a través de un abogado y en las últimas semanas también se han producido visitas al edificio para mostrarlo a los interesados.

«Incluso le hemos ofrecido el convento al Ayuntamiento de Ledesma. Es un edificio que tiene varios siglos de antigüedad y se podría arreglar por dentro para albergar un hotel, una bodega, o algún recurso turístico interesante», indicaba la religiosa.

«El tejado del convento está renovado recientemente y dentro hay 40 celdas de las religiosas que habitaban en él. Habría que hacer reformas en caso de habilitarlo como hotel, porque en las celdas que son muy austeras, por ejemplo no hay cuartos de baño individuales. En este tiempo desde que las religiosas se trasladaron a Cabrerizos hemos tenido que hacer algunos arreglos en sitios como las tapias de las huertas porque se caían algunos tramos. La idea que tenemos en venderlo, pero por un precio justo», resaltaba Elsa Campa.

El convento de las Madres Carmelitas de Ledesma está en las afueras de la localidad, extramuros, y la falta de vocaciones obligó a su cierre en julio de 2017, cuando apenas vivían en él tres religiosas que se trasladaron al monasterio del Carmelo en Cabrerizos.

Se trata de un recinto instituido por las Benedictinas en el siglo XII y refundado hace 149 años por el Carmelo. El decreto para cerrar el convento se estudió en la Congregación de Religiosos de Roma, que es el dicasterio Vaticano para los Institutos de Vida Consagrada. Una vez que el documento tuvo luz verde fue el obispo de la Diócesis de Salamanca el encargado de ejecutarlo.

Los vecinos de Ledesma se mostraron apenados por la partida de las religiosas debido a su gran vinculación con el pueblo y de su vínculo profundo a lo largo de la historia da buena cuenta el crecimiento de un barrio en el entorno del histórico cenobio. El edificio está ubicado junto a la carretera SA-302 que es la carretera de Fermosello y frente al parque de bomberos y el parque de autocaravanas del municipio.

La historia de este convento está vinculada tanto al que la orden tiene en Cabrerizos como al que está en Alba de Tormes puesto que el monasterio de Ledesma se refundó en 1876. Las religiosas de la orden de San Benito fundaron el convento en el siglo XII y a mediados del XIX eran 10 religiosas que vivían en él, pero una gran mortandad obligo a que pidiesen auxilio al Obispado de Salamanca para no dejar el convento vacío.

La refundación se produjo el 2 de noviembre de 1876 con tres Carmelitas llegadas desde Salamanca y Alba de Tormes e incluso en este recinto religioso hubo una espectacular talla de Santa Teresa que al quedar vacío en 2027 regresó a Alba de Tormes, donde se puede ver en el convento de los Padres Carmelitas.