Aldeadávila de la Ribera
Domingo, 20 de octubre 2024, 17:51
Hace ya 60 años que la imponente presa de Aldeadávila de la Ribera constituye una de las más importantes obra de ingeniería hidroeléctrica, con una vertiginosa altura de unos 140 metros de altura, 250 metros de ancho y una capacidad de embalsar hasta 115 hectómetros cúbicos que abarcan una superficie terrestre de 368 hectáreas, lo que equivale al tamaño del Santiago Bernabeu multiplicado por 97. Esta colosal presa está formada por una central con dos hercúleas turbinas capaces de producir 2.400 GW al año.
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El que se convertiría en todo un icono de Las Arribes se comenzó a construir en 1956 y los trabajos se extendieron hasta el año 1963. Las obras tuvieron que bregar con crecidas del río Duero, y de hecho, los días 2 y 3 de enero de 1.961, en pleno desarrollo, se registró una de las mayores crecidas del último siglo en la provincia, que puso a prueba este innovador proyecto para la época, ya que constituía la primera central hidroeléctrica construida bajo suelo horadada en una roca. Finalmente, en el 64 tuvo lugar la inauguración, con la anecdótica presencia de Francisco Franco.
Tan magna obra atrajo, como era natural, prosperidad al entorno, y así fue como nació el pueblo conocido como Salto de Aldeadávila, una zona residencial para los obreros que trabajaban en la central, y que con el paso de las décadas se fue despoblando hasta ser, a día de hoy, el nombre de un mirador desde el cual el turista que recorre la famosa ruta de los miradores de Aldeadávila puede contemplar estas cinceladas fauces que parecen engullir todo lo que hay alrededor y ponen de manifiesto las proezas de las que el hombre es capaz, al tiempo que empequeñece al visitante que contempla desde las alturas.
La presa ha servido de escenario principal en producciones cinematográficas tan famosas como «Doctor Zhivago«, ganadora de cinco Oscar y Globos de Oro, la española La Cabina, así como en campañas publicitarias como la de la japonesa Fujitsu en el año 2016.
En 2019 el tráiler de «Terminator 6» mostraba el lado más futurista de la presa, propia de un film de ciencia ficción. El rodaje contó con la participación de 200 personas durante el año 2018, y los drones y cámaras de ata velocidad capturaron el vanguardismo y encanto de la presa arribeña.
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Recientemente, en 2023, la infraestructura de Iberdrola formó parte de la décima entrega de la taquillera saga de acción «Fast & Furious». Y es que la belleza arquitectónica de la presa ha trascendido mucho más allá de su naturaleza, conquistando al turismo y también a la gran pantalla, convirtiéndose en uno de los escenarios de cine más codiciados del país.
Su magnetismo y poderío sigue hechizando al mundo entero, y es una de las mayores generadoras de energía eléctrica en España, puesto que supone más del 10% de la generación media hidroeléctrica del país, suficiente para abastecer a 250.000 hogares, por lo que no es de extrañar que desate tal poder de atracción.
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