Peñaranda acude por primera vez al Plan de Sequía de la Diputación

El Ayuntamiento de Peñaranda de Bracamonte instalará una nueva bomba eléctrica en el sondeo de San Francisco, que “evitará el coste económico que tiene subir el agua hasta el depósito”, según detalló la alcaldesa, Carmen Ávila, durante la celebración de la última sesión de pleno ordinario la pasada semana.

En el mismo encuentro, se procedió a la aprobación de la modificación de crédito con una modalidad de suplemento de crédito del remanente líquido de Tesorería para gastos generales, según dio a conocer la regidora. Esta nueva partida contempla la inversión de 10.955 euros por parte del Ayuntamiento en el proyecto presupuestado en 28.817 euros para la renovación de instalaciones y equipos electromagnéticos en el depósito de San Francisco. El resto del importe será aportado por la Diputación provincial a cargo del Plan Sequía 2022, gracias a la concesión de la subvención destinada a obras e instalaciones del sistema de abastecimiento de agua de consumo humano que permitan garantizar el suministro de agua en situaciones de carencia o falta de potabilidad.

Todos los grupos de la oposición dieron el visto bueno a esta mejora que será aplicada a una infraestructura complementaria teniendo en cuenta que el abastecimiento de agua potable principal de Peñaranda de Bracamonte se realiza desde la presa El Milagro, situada en el término municipal abulense de Mirueña de los Infantones y que fue construida en el año 1973. El depósito y sondeo de San Francisco se suele utilizar en situaciones de escasez de agua por sequía o incremento de población.

Precisamente en el punto de Dación de cuentas de la ejecución presupuestaria del tercer trimestre de 2022, la concejala Carmen Familiar, portavoz del Grupo Popular, mostró su preocupación al constatar que “de la tasa de agua se estima un ingreso de 368.000 euros para todo el año, y hemos ingresado 177.000, a falta de un mes para el cierre del ejercicio”.

La alcaldesa explicó que “se debe a un retraso en el cobro de recibos del agua, vamos por el primer trimestre de 2022”. También aclaró que “siempre hay un retraso por lectura de contadores y la gestión de Regtsa” pero que “hay que intentar que no sea de más de un mes, por el buen funcionamiento de las arcas municipales y por los vecinos”.

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