Béjar
Miércoles, 19 de julio 2023, 11:30
El Ayuntamiento de Béjar busca en estos días una solución rápida para solventar las averías de los dos autobuses urbanos que dejaron a los ciudadanos sin ese servicio durante la semana pasada por sucesivas averías.
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Entre las opciones con las que trabaja el equipo de Gobierno, destaca la compra de un vehículo a plazos o la incorporación de un autobús mediante un renting, si bien la concejala de Gobernación e Interior, Olga García, aclara que «las partidas presupuestarias están muy mermadas» aunque no descarta realizar una modificación presupuestaria porque, afirma, que «Béjar no se puede quedar sin autobús».
El objetivo no es otro que poner fin a las puntuales suspensiones de ese servicio para atender la alta demanda que existe en la ciudad durante los meses de verano debido a la apertura de las piscinas municipales de La Cerrallana. Se trata de una prestación muy utilizada por los ciudadanos, sobre todo jóvenes, para acceder a esas instalaciones pero, también, por los mayores para acercarse a realizar gestiones o acudir a la consulta del médico en el hospital a al centro de salud.
Una reparación exprés permitió poner en marcha de nuevo el vehículo más antiguo de los dos existentes para atender los trayectos demandados por los usuarios, pero el equipo de Gobierno gestiona una solución definitiva que, además, le permita agilizar los trámites ya que se dilatarían unas tres semanas o un mes algo que el alcalde, Luis Francisco Martín, considera inviable en plena temporada de verano.
Coincide en este punto con la concejala de Gobernación e Interior, que aclara que «no es tan fácil incorporar otro autobús» porque «la administración es lenta y requiere un contrato que supondría un mes de trámites». A mayores, asegura que el actual equipo de Gobierno también ha encontrado «muchas facturas sin pagar que ascienden a más de 20.000 euros» de distintas averías de los dos autobuses y explica que cuando accedieron al gobierno de la ciudad «nos encontramos con que el autobús más nuevo llevaba en el taller más de mes y medio y tenía que pasar la ITV» para añadir que el vehículo no pasó esa inspección técnica. Finalmente, comenta que fue durante ese período cuando el autobús más antiguo también se averió «en dos ocasiones», lo que ha motivado la suspensión del servicio.
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El Ayuntamiento de Béjar adquirió en noviembre de 2019 un autobús de segunda mano por un valor de 30.000 euros. Ese es el vehículo que permanece en un taller mientras que presta servicio el anterior, más antiguo aún ya que suma más de 30 años.
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