Un nuevo pueblo salmantino podrá detectar incendios 'ipso facto'

Ante la creciente preocupación por los incendios en épocas estivales, cada vez más voraces a causa del abandono del campo, el Ayuntamiento de Saucelle decidió solicitar a la Junta de Castilla y León, a través de la Fundación Patrimonio Natural, la instalación de cámaras térmicas de detección de incendios, una demanda que ha sido escuchada.

Saucelle ya cuenta con este sistema de cámaras conectadas con los parques de bomberos que permiten detectar, mediante puntos de calor, «posibles incendios en todo nuestro territorio así como identificar el origen de los mismos, generando una actuación mucho más rápida a los cuerpos de seguridad y bomberos», señala el alcalde del municipio, David Sánchez.

Este no es el primer municipio en contar con este tipo de tecnología de detección temprana de fuegos, y es que la Diputación de Salamanca, mediante los proyectos cofinanciados con Fondos Europeos Poctep-Interreg denominados «Biofrontera», ya puso en marcha este tipo de equipos en seis localidades, con un total de diez cámaras. Así, desde 2020 El Payo y Villar de Ciervo cuentan con una cámara cada uno, y La Fregeneda, Navasfrías, Villarino de los Aires y Vilvestre, con dos cámaras por municipio, dotadas de visor térmico que permite detectar focos de incendio desde una fase muy temprana de desarrollo, de tal forma que, llegado el caso, se logra activar a los medios de extinción en un periodo de tiempo más corto, mejorando los tiempos de respuesta y la eficacia del servicio en los municipios donde están instaladas y en su entorno más cercano.

Además, la Junta instaló durante el año pasado un total de 21 cámaras térmicas en la provincia, que se habilitarán durante este año 2024, en los municipios de Villar de Peralonso, Carrascal de Barregas, Cespedosa de Tormes, Valdemierque, Peñausende, El Payo, Ahigal de los Aceiteros, Espeja, La Fregeneda, Ciudad Rodrigo, Cerezal de Peñahorcada, Villarino, Herguijuela, La Alberca, Serradilla del Arroyo, Agallas, Villasrubias, Lagunilla, Garcibuey, Navarredonda de la Rinconada y Candelario. Esto supondría que a lo largo de este año la provincia salmantina contaría con un total de 31 cámaras térmicas en funcionamiento para vigilar el monte.

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