Más problemas para la carretera que une Peñaranda y Rágama tras un nuevo corte

El corte de otro tramo de la carretera CL-610, esta vez desde la rotonda de acceso a la autovía A-50 en Peñaranda hasta Rágama, vuelve a traer auténticos quebraderos de cabeza para conductoresy vecinos de los pueblos afectados, entre los que también se está Paradinas de San Juan.

Teniendo en cuenta que el corte al tráfico será total desde el lunes y se ha anunciado que durará hasta el 27 de agosto, en Rágama una de las mayores preocupaciones es la asistencia sanitaria en una época en la que aumenta la población por los veraneantes y se producen, también, más urgencias. La distancia habitual de 13 kilómetros, apenas 10 minutos, que les separa del centro de salud de Peñaranda, se convierte ahora como mínimo en el doble si usan el atajo por Rasueros, Horcajo y Palaciosrubios y supera incluso los 53 kilómetros en el trazado alternativo que da la Junta para este mes y medio de obras.

En este caso los ragameños piden que en este tiempo, y dadas las circunstancias del corte total de la carretera, puedan acudir al servicio de urgencias de Madrigal de las Altas Torres (Ávila) que queda a tan sólo 15 kilómetros e incluso en caso de dolencias más graves al hospital de Medina del Campo (Valladolid) como hacen ya los vecinos de Rasueros y Horcajo de las Torres (Ávila).

“Es una propuesta que debemos trasladar a los responsables de la Gerencia de Atención Primaria pero hasta ahora sólo he podido hablar con los de carreteras precisamente para exponerles cómo va a llegar hasta aquí una ambulancia del 112 por carreteras secundarias y sin indicaciones de por dónde atajar para tardar menos tiempo”, afirmó ayer el alcalde de Rágama, José Luis Moyano.

“La semana pasada escribí a la Junta para ver cómo van a venir la médica, correos, servicios de emergencia, a qué centro médico de urgencias debemos ir dado que Peñaranda pasa a estar oficialmente a 40 kilómetros de Rágama, cómo se supone que se van a desplazar las que prestan la ayuda a domicilio y están una hora en Rágama y la siguiente en Paradinas o el Campo”, añadió el regidor.

Cabe recordar, además, que las especiales características del proyecto de mejora que está acometiendo la Junta en la CL-610 obligan al corte total de la misma para la rehabilitación del firme reciclado con cemento. Desde Fomento han asegurado que “se tratará de acortarlo lo más posible” y recuerdan que el primer tramo se reabrió 10 días antes de lo previsto.

El trazado alternativo que da la Junta para llegar desde Rágama a Peñaranda y a la inversa pasa por llegar a Madrigal de las Altas Torres, tomar la CL-605 hasta Cantalapiedra, enlazar con la SA-810 hasta el cruce de Riolobos y allí coger la SA-801 hasta Peñaranda, un recorrido de más de 66 kilómetros.

Un 17 por ciento del tráfico que soporta la CL-610 corresponde a vehículos pesados, otro de los sectores más afectados por el corte de la vía y los rodeos que deberán dar desde el lunes.

• Temas
• Junta de Castilla y León
• Industria Automovilística
• Ragama