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La oferta turística es absolutamente completa en la localidad arribeña de Villarino de los Aires, un municipio en cuyos alrededores se elevan sistemas rocosos desde lo alto de miradores como el de Pilatos, se forman cuevas que explorar —fruto de la erosión— y se extienden un total de cinco rutas senderistas recientemente acondicionadas, una de ellas la que conduce a la flamante cascada del Desgalgadero, donde el agua cae desde ochenta vertiginosos y escandalosos metros de altura.
Aunque con la llegada de los meses veraniegos el agua fluye tímidamente, las estampas paisajísticas del entorno son merecedoras de contemplación. Salir al encuentro de los entresijos de Villarino es, además, descubrir el Teso de San Cristóbal y escudriñar sus sepulturas celtas, o el emblemático espacio de Ambasaguas, que dispone de mesas y bancos en los que compartir una tarde inolvidable a orillas del río Tormes, en su desembocadura al Duero.
La física también hace gala de sus maravillas en la mítica Peña del Pendón, donde una roca de más de ochenta toneladas se sostiene con un halo etéreo, y puede ser, sin embargo, movida por una sola persona, desafiando al aventurero.
El pasado es palpable en el entorno más puro de Villarino, como en los antiguos molinos del Ricardico, donde el agua fluye furibunda poniendo banda sonora a la experiencia campestre.
La señalización de las rutas es tan detallada en los senderos que incluso es posible decidir a tiempo si continuar o volver sobre nuestros propios pasos, ya que los carteles indican la dificultad que está por venir, y sugieren para qué público es más adecuada.
El deporte y el ocio también tienen cabida en esta afable localidad, que acaba de estrenar una moderna pista de pádel que hace las delicias de vecinos de la zona y visitantes de fuera. También hay un lugar en el que refrescarse tras un intenso partido, porque Villarino dispone de unas completas instalaciones en las piscinas municipales, dotadas también de bar, y que estarán abiertas a partir del día 15 de junio.
Para mayor tranquilidad, Villarino es un refugio no solo bello sino también seguro, y es que su centro médico permanece abierto todos los días de la semana y los 365 días del año. En definitiva, las aguas, bien en calma o turbulentas, lucen cristalinas en un municipio con todos los lujos para una escapada veraniega.
Colaboración patrocinada por Ayuntamiento de Villarino de los Aires
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