Las lluvias podrían animar la campaña micológica

Dentro de una temporada micológica que no está siendo muy positiva en la gran mayoría de las zonas de la provincia de Salamanca, las lluvias que arrancaron este miércoles con fuerza por el suroeste “podrían animar la campaña, siempre que al mismo tiempo que cae el agua las temperaturas acompañan”, según destacó el micólogo mirobrigense José Ignacio Gómez Risueño.

Una previsión que coincide con la ofrecida por el Micocyl, que señala que “las precipitaciones registradas la pasada semana han servido para provocar tímidas fructificaciones de Boletus edulis (boletos) y Lactarius deliciosus (níscalos) en masas de “pino albar” (Pinus sylvestris)”, aunque estos brotes de setas se caractericen por “darse de forma muy dispersa y en las mejores áreas productoras, con rendimientos de recolección muy bajos, inferiores a 0,5 kilogramos por hora”.

Entre estas zonas más favorables para la recolección de setas, especialmente boletos y “huevos de rey”, se posiciona la comarca de El Rebollar, “alcanzando rendimientos de recolección superiores a un kilogramo por hora”, afirman desde Micocyl, en base a los muestreos que desde el pasado mes de septiembre se vienen realizando en las parcelas micológicas y en recorridos variables por las masas forestales por parte de la Fundación Cesefor con el apoyo de la Junta de Castilla y León.

Hasta el próximo domingo se prevé un episodio de fuertes lluvias, por encima de los 50 litros por metro cuadrado en muchas zonas de la provincia, por lo que “en micología, al igual que en otros sectores que dependen de la meteorología como el campo, siempre se ha dicho que nunca es tarde si la lluvia es buena, y en esta ocasión puede serlo, provocando la fructificación de numerosas especies siempre que las temperaturas acompañen”, señaló Gómez Risueño.

Una campaña micológica que está siendo pésima en el Acotado Micológico de “Ribera del Cañedo”, la zona de Valdelosa, aunque buena en El Rebollar y puntos concretos del Parque Micológico que esta zona de la comarca de Ciudad Rodrigo integra junto a las sierras de Francia, Béjar y Quilamas, pero que podría finalizar “si llegan las heladas y los cierzos”, aseguró el micólogo.

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