La tensión y el mal ambiente gobiernan en un Ayuntamiento de Ledesma ‘ingobernable’

El Ayuntamiento de Ledesma celebró este sábado una sesión plenaria ordinaria en la que reinó la tensión y el mal ambiente, demostrando una vez más ser un municipio “ingobernable” debido a que los votos de la oposición (mayoría), siguen contradiciendo las cuestiones presentadas por el equipo gubernativo.

En este caso, uno de los puntos del día, la aprobación de las Cuentas Generales de 2020, no se llevó a cabo debido precisamente a la oposición tanto de los cuatro representantes del Partido Popular, así como la del tránsfuga Julián Salinas.

Pero el momento más tenso de la sesión se vivió con la aprobación de la ordenanza municipal reguladora “respecto a la aplicación de purines, estiércoles, residuos biodegradables de origen agrícola, ganadero y lodos procedentes de depuración de aguas residuales con fines agrícolas”, punto que tampoco se aprobó a consecuencia de nuevo del voto en contra de la oposición en bloque.

La propuesta del equipo de Gobierno no logró salir adelante y la oposición acusó al mismo de “no haber contado con la opinión ni de ganaderos ni agricultores”.

Juan Alberto López, concejal de Medio Ambiente, respondió por alusión a estas acusaciones afirmando que “se ha llevado a cabo el procedimiento tal y como debe hacerse y ha habido un tiempo para alegaciones, no hemos recibido ninguna y por ello la hemos traído al pleno para su aprobación”.

Los reproches continuaron en ambas direcciones, sobre todo los que Salinas hizo hacia el concejal de Medio Ambiente, afirmando que la ordenanza “denotaba ignorancia y falta de conocimiento total de las labores agrícolas y ganaderas”. López respondió defensivamente afirmando que esa era una “opinión personal” del tránsfuga.

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