La solución para frenar el botellón en Béjar: El Regajo cerrado

El Ayuntamiento de Béjar ha decidido cerrar el paraje de El Regajo, ubicado en la subida a El Castaña, para evitar la celebración del botellón en plena quinta ola de la pandemia del coronavirus y la elevada incidencia de contagios entre la juventud.

La medida fue acordada entre el equipo de Gobierno del PSOE y Ciudadanos y la Policía Local en vista de las reuniones de jóvenes y los actos vandálicos detectados a principios de este mes en viviendas de la zona. El concejal de Seguridad, José Luis Rodríguez Celador, ha explicado a LA GACETA que el cierre del Regajo “sigue una recomendación de la Policía Local, así como las medidas de refuerzo de la Junta, que hablaba del cierre de parques para el control de consumo de bebidas alcohólicas” como allí sucedía. Por su parte, la alcaldesa, María Elena Martín, ha asegurado a este periódico que las medidas se prolongarán mientras así lo determine el Gobierno regional.

El acceso al paraje de El Regajo ha sido vallado para evitar las reuniones de jóvenes, principalmente en las noches de los fines de semana, en una ciudad que cuenta con una sentencia judicial desde hace 13 años por la que se prohibe la práctica del botellón en todo su término municipal. Esa medida se adoptó en 2008 pero, ahora, la Junta de Castilla y León ha impuesto nuevas restricciones en lugares frecuentados por los jóvenes en verano para celebrar estos botellones.

De hecho, fue la pasada semana cuando la Junta de Castilla y León ordenó el cierre de los parques públicos y lugares susceptibles de ser el lugar de reunión de los jóvenes. El horario marcado por el Gobierno es de 00:00 a 07:00 horas con el obligado refuerzo de la vigilancia policial para disuadir a los jóvenes. En este sentido, el Ayuntamiento de Béjar no ha emitido ningún bando para informar a la ciudadanía sobre estas medidas ni cartelería en los propios espacios afectados.

Fue el pasado mes de junio cuando Béjar recuperó el paraje de El Regajo después de año y medio cerrado por las obras de rehabilitación que el Consistorio y la Junta realizaban en su interior en el marco de un programa mixto de formación y empleo que ha permitido invertir allí 490.000 euros.

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