La ruta salmantina con cinco siglos de historia que se ‘muere’ por la falta de inversiones

La ruta de Carlos V que atraviesa la provincia de Salamanca desde la zona de Peñaranda al Alto Tormes por Gallegos de Solmirón sufre un notable estado de abandono ante la falta de promoción institucional de un itinerario de rango europeo y de mantenimiento de la señalización y otros elementos del recorrido.

Así se pone de manifiesto en elementos como la señalización o los indicadores del recorrido, que llevan años destrozados por la erosión de las inclemencias climatológicas sin que nadie haya optado por reponerlos o, al menos, retirarlos para evitar ofrecer a los visitantes una imagen de total abandono. Es el caso, por ejemplo, de los indicadores ubicados en Gallegos de Solmirón, que dependen del área de Turismo de la Junta de Castilla y León y que no ofrecen ya ninguna información porque se ha borrado.

El itinerario reproduce el camino que realizó el emperador Carlos V (I de España) camino de su retiro en Yuste en 1556, dos años antes de morir. Comenzó en Laredo, recorrió toda Castilla y, tras un tiempo en Jarandilla de la Vera, siguió al monasterio extremeño. Se trata de una ruta que tiene notable relevancia en diferentes lugares europeos y, también, en provincias de Castilla y León. La Red Itinera Carolus V Imperator patrocina y ampara eventos culturales y turísticos relacionados con esos itinerarios, pero Salamanca y Ávila son las dos únicas provincias del recorrido que, hasta el momento, han quedado excluidas de ese tipo de iniciativas. Tanto Cáceres como Valladolid, Cantabria o Burgos acogen numerosos eventos a lo largo del año para promocionar ese legado y, de paso, convertirse en un elemento más del desarrollo turístico de los lugares por los que transitó el emperador. De hecho, la Junta de Castilla y León entró a formar parte de esa Red en noviembre de 2017 “con el objetivo de avanzar hacia la especialización de un turismo histórico vinculado a personajes reales relacionados con la historia de la Comunidad y que son un referente universal, como el Cid, Isabel la Católica o Carlos V. De esta forma, la historia se convierte en un importante reclamo turístico internacional”.

Por el momento, la repercusión en la provincia de Salamanca ha sido nula a tenor del estado en el que se encuentra la señalización. No es la señalización el único problema que sufre la ruta, ya que lugares tan significativos como la casa donde durmió el emperador a su paso por la provincia, como la casa parroquial de Gallegos, se encuentran también en un notable estado de abandono. Años atrás, el Consistorio solicitó al Obispado de Salamanca, que es el titular del edificio, la cesión del inmueble para evitar su deterioro y para darlo un uso social. Se planteó aprovecharlo como una especie de centro social o de día para los mayores o, también, aprovechando las posibilidades turísticas de la ruta del emperador, darlo un uso más turístico al tratarse de un lugar en el que durmió el emperador. Sin embargo, tras diferentes reuniones y contactos, la casa sigue cerrada y sin uso.

La falta de arraigo en la provincia a día de hoy es tal que las últimas actividades realizadas en terreno salmantino han sido organizadas por entidades de otras provincias. Fue el caso de la Ruta BTT Carlos V, que organizaban colectivos extremeños con salida en Gallegos pero con escasa relevancia pública y social en el resto de la provincia.

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