La romería de la Virgen del Hinojal vuelve a Paradinas de San Juan

Emoción y devoción a partes iguales se vivieron en la jornada del sábado en la romería de la Virgen del Hinojal que Paradinas de San Juan recuperó tras el paréntesis de la pandemia covid.

A las 12:00 horas, desde la plaza, partía la comitiva escoltando a la imagen mariana en el regreso a su ermita tras el triduo que se ha celebrado esta semana en la iglesia parroquial.

En la caja de un pequeño camión fue colocada la Virgen en sus andas, de cara a los fieles, y éstos la siguieron durante los cerca de tres kilómetros que separan el pueblo de la ermita a través de un camino de tierra bajo un calor sofocante. Otros muchos optaron por desplazarse en vehículos detrás de la mencionada comitiva formando una larguísima cola que prácticamente ocupó todo el camino.

Los dulzaineros de Cantaracillo acompañaron el recorrido, en el que tampoco faltaron las oraciones en las paradas del Vía Crucis, llegando a la ermita una hora después donde la patrona fue recibida con una gran ovación de los asistentes.

En los jardines de la ermita, respetando el uso obligatorio de la mascarilla y con todo el público sentado, se desarrollaron el resto de actos festivos del día grande como el tradicional remate de banzos y la misa solemne cantada por el coro parroquial de la localidad.

Por primera vez en la historia de esta centenaria fiesta, una mujer fue la encargada de dirigir el remate de banzos de la Virgen del Hinojal y motivar al público para que fuera subiendo sus pujas por cada uno de los cuatro banzos de las andas.

Vecinos y visitantes tuvieron, también, ocasión de ver el interior de la ermita donde se venera la imagen de la Virgen del Hinojal durante todo el año y el pozo de aguas “milagrosas” ya que se la considera abogada contra las viruelas.

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