La lista de espera para convertirte en Hombre de Musgo llega a ocho años

Es una de las fiestas más singulares de la provincia de Salamanca y gracias al trabajo colectivo logró en 2019 la declaración como Fiesta de Interés Turístico Internacional.

Se trata del Corpus Cristi que, cada año, engalana la ciudad de Béjar para disfrutar de la procesión con el Santísimo Sacramento acompañado por seis voluntarios que reviven la leyenda de los Hombres de Musgo.

Dicen aquellos que ya han vivido esa experiencia que es única y así debe ser porque el Ayuntamiento de la ciudad cuenta con un listado que alcanza el año 2030 formada por mujeres y hombres interesados en cubrir sus cuerpos con el musgo y recorrer las calles en esa festividad tan importante para la ciudad.

Restan aún tres de las seis plazas reservadas para la edición de 2030 y, por tanto, el Consistorio no tardará en abrir una nueva década en una tradición que pervive gracias al trabajo de la Real Abadía del Santísimo Sacramento, la Cofradía de la Santa Vera Cruz y las hermandades de Jesús Nazareno y Seráfica, junto con operarios municipales y voluntarios a título particular, que hacen que Béjar luzca sus mejores galas con los elementos ornamentales y las alfombras de sal en distintos puntos del casco histórico.

Los preparativos para este año ya han comenzado para que todo esté listo el 11 de junio cuando, de nuevo, la Custodia saldrá a la calle para ensalzar al Santísimo. El departamento de Turismo se ocupará de la ornamentación de las calles y balcones, mientras que el área de Cultura programará distintos actos para completar la oferta festiva, como un mercado medieval como el celebrado en 2022. Precisamente este departamento gestiona el listado de personas para vestirse de musgo y trabaja en estos días para confirmar la presencia de los seis voluntarios. Algunos ya han dado su visto bueno definitivo pero restan aún varios que, por distintos motivos como enfermedades y operaciones, están pendientes de su evolución para participar a un mes vista de la celebración.

Mientras, la Cofradía y las hermandades preparan sus altares con la recogida de flores en el impresionante entorno natural de la ciudad para, después, convertir puntos como la calle Rodríguez Vidal, el entorno del ábside de San Gil y el atrio de San Juan en los tres altares principales del Corpus. Especial atención tiene este año el altar de la Seráfica Hermandad, ya que quiere sumarse a la conmemoración del octavo centenario de la tradición belenística. Para ello, recreará la cueva de Greccio, en la provincia italiana de Rieti, donde la tradición cuenta que San Francisco inventó el belén. Allí se creará la escena con el Misterio, San Francisco realizando la predicación y San Antonio oficiando la misa.

Por tanto, Béjar cuenta ya los días para volver a celebrar una festividad que llena de turistas las calles y las plazas hoteleras después de años de trabajo para lograr los distintos reconocimientos turísticos.

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