Guijuelo, enclave de caminos ideal para disfrutar con el mejor sabor

La ubicación de la localidad de Guijuelo y sus condiciones orográficas y climáticas han ido labrando el devenir de la localidad hasta hacerla lo que es hoy: el epicentro de la actividad de la industria cárnica del cerdo ibérico a nivel nacional e internacional.

Esas características le han permitido convertirse ahora en un punto de encuentro y encrucijada de caminos que conducen a verdaderas joyas naturales, patrimoniales o culturales de la provincia. Y es que, desde Guijuelo y en muy poco tiempo y distancia se puede alcanzar Salamanca capital, se puede acceder a las sierras de Béjar y Francia con sus grandes atractivos, acercarse hasta Alba de Tormes o hacer uso de la futura vía verde, cada vez más próxima como un elemento vertebrador de turismo a nivel interautonómico.

Y es que, cuando este camino natural que aprovecha el trazado de la antigua vía férrea de la Ruta de la Plata, quedarán conectadas en una única ruta Salamanca capital y la ciudad cacereña de Plasencia, con la relevancia turística que ello conlleva y con el simbolismo que implica unir dos provincias y dos comunidades autónomas. Guijuelo será una parada obligada porque, qué mejor que descansar de una ruta de este calado disfrutando de lo que mejor saben hacer en la localidad, el jamón. Un jamón que se complementa con cada vez más productos, que hacen difícil la elección, pero hay tiempo para todo y, según lo requiera el momento, se puede degustar la paleta, el lomo, los embutidos u otros productos curados, sin dejar de lado la proliferación cada vez más amplia de las elaboraciones culinarias con las carnes frescas que procesan los mataderos y salas de despiece de la localidad.

Son muchos los caminos que llegan o parten de Guijuelo, tanto históricos como modernos. Ahí está el camino a Peñaranda por Salvatierra de Tormes, el ramal de los caminos peregrinos hacia Ávila, paralelo al Tormes, o la Vía de la Plata con sus miliarios en Palacios de Salvatierra. Y qué decir de las actuales infraestructuras, como la Autovía de la Plata A-66 que conecta el norte y el sur de España con Guijuelo como uno de sus puntos clave.

La naturaleza en Guijuelo es la gran desconocida, pero no hace falta salir del término para disfrutar de ella a través de pequeños paseos o rutas de más calado. Y es que ahí está el Monte de Tonda, con sus secretos y sus rutas, sin dejar de lado el atractivo del pantano de Santa Teresa, que recibe las aguas del Tormes y donde también se puede disfrutar de momentos de recogimiento y, si se es aficionado, de pesca dentro de un magnífico entorno.

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