El frío de diciembre no impide que los fieles de Pizarral honren a Santa Bárbara

El frío de los atardeceres de diciembre no impidió que los vecinos de Pizarral celebraran un año más la festividad de Santa Bárbara, recuperada en 2019 tras seis décadas sin que la imagen de la santa saliera en procesión.

La localidad congregó a vecinos de diferentes edades en torno a la imagen de la santa, que protagoniza las fiestas chicas o de invierno y que sirve de excusa para que los hijos de Pizarral regresen al pueblo para participar en los actos organizados. Destacaba la eucaristía y la posterior procesión con antorchas, ya en plena oscuridad de una tarde de diciembre. El tamborilero José Antonio López “El Emigrante”, de Cristóbal, era el encargado de poner la nota musical mientras se lanzaban cohetes al paso de la imagen de la santa, que llegó hasta el recinto del salón, donde se prendió la tradicional hoguera de Santa Bárbara mientras el Ayuntamiento ofrecía licores y dulces. Las mujeres tuvieron este año notable protagonismo en el recorrido ya que fueron ellas las encargadas de llevar la imagen de la santa en procesión como antesala de la fiesta de las águedas que preparan para el año que viene y que cuenta ya con al menos cuarenta participantes previstas.

Acabada la invitación, el cortejo retomó el camino hacia la iglesia parroquial, donde se despidieron de la santa, que presidía un lateral del altar mayor, mientras que la Virgen del Rosario presidía el otro. La actividad seguía en el salón con música, primero con un tributo a Fito y, después, con un DJ. No obstante, la despedida final a estas celebraciones llegaba con la castañada popular ofrecida por la Diputación provincial a través de Asadina, que ha tenido lugar este domingo por la tarde.

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