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Dice la tradición oral que «Felipe II nació en Villoruela» pese a que las fuentes oficiales sitúan en Valladolid el nacimiento del que fue rey de España de 1556 a 1598.
Esta curiosa historia hace que el monarca tenga el honor de contar con una calle en este pueblo y que su nombre sea el que lleva el colegio público del municipio. Ambas denominaciones honoríficas dan a entender el verdadero valor que Villoruela ha dado a la posibilidad de que fuera el lugar en el que la reina Isabel de Portugal diera a luz al hijo de Carlos I de España y V de Alemania.
Además, ahora, a partir del 1 de junio, esta localidad del noreste de Salamanca estrenará los gigantes fabricados con cariño por personas de la localidad en la sede de la asociación Villoruela se Mueve, inspirados en la creencia popular de que el rey Prudente, bisnieto de Isabel la Católica, llegara al mundo en Villoruela. El acto comenzará con un recorrido de los gigantes desde la iglesia y posterior representación en la ermita, con comienzo a las 20:00 horas.
El escritor de Arabayona de Mógica Agustín Salgado recordó en su día que Villar y Macías había escrito que con ocasión de la boda de Felipe II con María Manuela de Portugal, «ese mismo día, lunes, partieron sus altezas de Salamanca y fueron esa noche a Las Villorias». «En buena lógica hay que pensar que fueron a Villoruela» donde se hospedarían en el palacio levantado por el cardenal Juan Tavera, aclara Salgado con el fin de dar a entender que el nacimiento se pudo haber producido en el mismo lugar.
Los vecinos de este pueblo famoso por su destreza con la mimbre aseguran que tienen el documento que acredita que el monarca nació en Villoruela. Se trata del Libro Sacramental del siglo XVI, que empieza en el año 1509, encuadernado en piel. El bachiller Tomás (o Toribio) Rodríguez firma tras manifestar que «nació el príncipe de Castilla don Felipe».
Más tarde, en 1776, el historiador Bernardo Dorado aseguró que Felipe II nació en una casona del barrio de La Puebla, palacio de don Juan Tavera o cardenal Tavera, natural de Toro y sobrino del dominico inquisidor Diego de Deza. Tavera presidió el Consejo de Castilla hasta 1539, en que fue nombrado inquisidor general, y era arzobispo de Santiago de Compostela. Tavera pasaba los veranos en Villoruela, «donde había mandado construir la iglesia de San Pedro Apóstol».
Después, en 1927, el que fuera notario de Macotera, Francisco González Bautista, estudió la partida de nacimiento de Felipe II en Villoruela y dijo que «era del nacimiento del príncipe, no del bautismo, que tuvo lugar al día siguiente en Valladolid».
El sacerdote Bernardo Cuesta redactó un artículo en la revista 'Agora o Nunca' de Villoruela cuya conclusión es que «el documento parroquial de Santoyo viene a confirmar la tesis de todos los que afirman que Felipe II nació en Valladolid».
También en su día Villoruela tuvo el privilegio de acoger la visita del historiador Manuel Fernández Álvarez que utilizó el rigor de la investigación histórica para exponer argumentos a favor de la tesis villoruelense. Sus palabras se conservan gracias a la grabación que permitió realizar al vecino de Villoruela, Basilio Sánchez Lázaro.
Sánchez Lázaro tiene claro que «Felipe II nació en Villoruela». «Según nuestros antepasados, los reyes venían de Portugal y la reina no tuvo tiempo de llegar a Valladolid».
En el mismo extremo se manifiesta Juani Cortés, portavoz de Villoruela se Mueve, asociación promotora de esta iniciativa junto al Ayuntamiento. «El cura dejó escrito que había nacido aquí, seguro que como los historiadores dicen nació en Valladolid, pero como la gente dice por qué no pudo nacer aquí, es algo que nos han transmitido los mayores».
«Todos los villoruelenses sabemos de nuestra historia. Y además estamos empeñados en que esta perdure en el tiempo», asegura el alcalde, Javier Miguel de la Torre.
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