Así se descubrió la joya arqueológica de «valor incalculable» hallada en Villasrubias

«Se ha producido un descubrimiento significativo para la comarca mirobrigense», tal y como señala en su informe el arqueólogo José Luis Francisco, quien ha hallado en Villasrubias una nueva estela antropomorfa que se remonta cronológicamente a finales del tercer milenio-comienzos del segundo milenio antes de Cristo. El descubrimiento se produjo «por casualidad», durante un paseo por la zona, y se encuentra fuera de contexto arqueológico, al haberse localizado en un solar propiedad del Ayuntamiento, tal y como explica su descubridor.

«La nueva estatuaria se encuadraría dentro del grupo Centro-Occidental, formado principalmente por las estelas del grupo Hurdes-Gata, aunque se extiende e incluye todas las estatuas situadas entre el Tajo y el Duero abarcando un largo periodo cronológico desde los epílogos del Megalitismo hasta la I Edad del Hierro», detalla en este primer estudio.

LA GACETA ha hablado con José Luis Francisco, que califica el valor de la pieza de «incalculable» y afirma que revela nuevos datos. «La Ley de Patrimonio es clara: el Museo de Salamanca debería ser el lugar donde recalara en última estancia. Sin embargo, existe un precedente con la estela de Robleda, puesto que desde su descubrimiento se encuentra en dependencias municipales del Ayuntamiento. Soy de la opinión de que la cabecera de la comarca debería de tener un museo a la altura de su patrimonio arqueológico, un lugar que sirva de centro de interpretación de arte, de Megalitismo, del mundo de las estelas, siendo la comarca un núcleo tan importante en esta materia, un valor añadido que daría vida a una comarca moribunda», asegura.

«Es una pieza de valor incalculable. Nos desvela datos hasta ahora desconocidos y, en parte, reafirma la hipótesis que teníamos sobre la movilidad de los primeros grupos productores a lo largo del territorio en busca de nuevas tierras y materias. El descubrimiento, fortuito, se produce al percatarme que junto a un muro se encuentra una losa de granito con una incisión profunda visible», añade el descubridor.

Por su parte, el alcalde de Villasrubias, Ángel Justo Rubio, apuesta por conservar el «tesoro» para añadir valor patrimonial y turístico al pueblo.

«Es algo muy importante para nosotros, porque aquí no tenemos nada, no hay puentes romanos, ni patrimonio de valor de este tipo. Tan solo una piedra junto al campanario, del año 1600, que un noble donó al obispo en su día, pero esto ya son palabras mayores, hablamos de una pieza muy muy antigua, y todo apunta a que sí se confirmará la fecha en la que está datada», afirma a este periódico.

«Lo que queremos ahora es que se quede en el pueblo, que no se la lleven fuera como ha sucedido con otras estelas, que se han ido al Museo de Salamanca. Por eso precisamente lo hemos mantenido en secreto mucho tiempo, hasta que José Luis ha finalizado su informe y se ha publicado. La hemos mantenido a buen recaudo en las dependencias municipales. Para los que no entendemos, era una simple roca, como muchas otras. Llevaba ahí mucho tiempo, a la vista de todos. De hecho, se había descartado a la hora de hacer una fuente, hasta que él la vio en uno de sus paseos.», finaliza.

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