La Covatilla afronta su última semana de apertura de pistas

La estación de esquí La Covatilla afronta su última semana de apertura para la práctica del esquí con el objetivo de aprovechar los festivos de la Semana Santa durante las vacaciones escolares.

Así lo ha asegurado el alcalde, Luis Francisco Martín, en unos días en la que se espera la llegada de turistas y esquiadores, aunque en menor medida que en semanas anteriores en vista de la poca afluencia de esquiadores registrada durante el pasado fin de semana.

«La llegada del buen tiempo ha hecho cambiar el chip al público y ya opta por sol y campo como otros atractivos en lugar de esquiar» ha afirmado para añadir que resta poca nieve en las instalaciones si bien, de momento, la zona de Debutantes aguanta los espesores para disfrutar del esquí con seguridad.

Por tanto, la apertura de pistas se limitará a las tres zonas esquiables existentes en esa zona para principiantes ya que la inoperatividad del telesilla impide la puesta en servicio de más pistas en otras zonas de las cotas superiores.

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Por otro lado, la nieve acumulada podría aumentar en estos días ya que el mal tiempo podría traer precipitaciones en forma de nieve hasta las instalaciones de invierno. En concreto, las nevadas podrían caer en la jornada de hoy así como mañana y este Viernes Santo ya que, además, se prevé una notable bajada de las temperaturas. El tiempo mejorará de cara al fin de semana cuando volverán los intervalos de nubes ya sin precipitaciones.

Sin embargo, el equipo de Gobierno deberá esperar a que se retire la nieve acumulada en las pistas centrales de las instalaciones de invierno bejaranas para poder avanzar en la revisión del telesilla pendiente en esta temporada de esquí. En este sentido, el alcalde ha explicado que: «La empresa encargada de la V7 no tardará en pasar en finalizar los trabajos, realizar la prueba de carga y tener operativo el telesilla para siete años u ocho», es decir, para las dos próximas legislaturas en una inspección técnica pendiente desde 2022.

Será de cara a las próximas cuando el Ayuntamiento realice el balance de una temporada que comenzó el 8 de febrero y concluirá este domingo si no cambian las previsiones después de más de 70 día de temporada con cierres por mal tiempo. «Cada día que se abre es una pérdida importante de dinero porque tener allí tanta gente para que suban veinte personas es un poco ridículo. La mayoría de las estaciones ya han cerrado siendo más grandes que nosotros y teniendo diez veces más de nieve que nosotros», ha concluido.