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El Campo de Peñaranda, El Pedroso de la Armuña y Rágama presumen de contar con viviendas de uso turístico o casas rurales de propiedad municipal que son todo un éxito como recurso turístico y por el servicio que ofrecen a los hijos del pueblo que ya no cuentan con vivienda en el municipio y quieren volver a disfrutar más de un día de la tierra de sus raíces. Tal es el éxito de esta iniciativa que los alcaldes del Campo de Peñaranda y de Rágama ya estudian fórmulas para o bien ampliar las plazas o dotar a su municipio de otra de estas viviendas.
El Campo de Peñaranda cuenta con albergue desde el año 2011, aunque posteriormente fue transformado en vivienda de uso turístico. Esta casa cuenta con 8 plazas repartidas en dos habitaciones. Goza de gran demanda sobre todo en verano, y especialmente en el mes de agosto. Hasta ahora no había límite en la reserva, por lo cual una misma familia se podía beneficiar de la vivienda durante todo el mes de agosto. Ahora, el Ayuntamiento estudia otra fórmula para que sean más familias las que se puedan beneficiar de este alojamiento en los meses de más demanda y que se pueda rotar. Esta vivienda toma por nombre 'La Casa del Maestro' por estar construida en la antigua vivienda de los docentes. La vivienda de Rágama funciona desde hace dos años, cuenta con nueve plazas y también se hizo en la antigua casa de maestros, aunque posteriormente fue la vivienda del alguacil.
«El 90% de la gente que viene son hijos del pueblo que hacía décadas que no venían, aunque por ejemplo ahora en invierno viene gente atraída por aficiones como los halcones o el campeonato de galgos», anota el alcalde de Rágama, José Luis Moyano.
«Suele estar reservada prácticamente los dos meses y pico de verano y otras fechas como en fiestas, navidades y algunos puentes», añade el regidor. «Se nos queda un poco pequeña», declara el alcalde, por eso están buscando «alguna vía de financiación para ampliarla con una estancia más en el patio».
Otro pueblo de la zona con casa rural es El Pedroso de la Armuña. Empezó a funcionar en agosto de 2021. La mayor parte de los inquilinos son turistas españoles, madrileños ante todo y alguna familia francesa. Otro ejemplo de alojamiento rural municipal son los albergues. Uno de ellos es el de Mancera de Abajo. Está construido en las antiguas escuelas y nació para ofrecer la posibilidad de pernoctar a los peregrinos que realizan la ruta 'De la cuna al sepulcro' que transcurre por diferentes localidades de las provincias abulense y salmantina, entre Ávila y Alba de Tormes.
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