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Carrascal de Barregas
Jueves, 18 de julio 2024, 12:12
El Ayuntamiento de Carrascal de Barregas aprobó en pleno extraordinario el Plan Económico-Financiero que se han visto obligados a presentar por ley dada la «grave situación económica» que vive el Consistorio, según palabras de la propia alcaldesa del municipio, Noelia Merino. La aprobación se llevó a cabo con el voto en contra de los tres concejales del Partido Popular y la abstención de la concejala no adscrita, Isabel García.
Ese plan económico afectará, en su gran mayoría, a los vecinos de Carrascal quienes deberán asumir la subida del IBI de casi un 20% que se aprobó, además del aumento de la tasa de residuos vegetales y de la nueva tasa de depuración de aguas residuales.
Estas medidas se suman a las que el equipo de mando ya había tomado cuando llegó al gobierno como la reducción de gastos de fiestas, la eliminación de asignaciones a los grupos políticos, la reducción de la frecuencia de las Juntas de Gobierno y la supresión de las comisiones delegadas.
La regidora municipal, en su alegato, explicó que «la deuda financiera a diciembre de 2023 era superior a los -630.000 euros y nos hemos encontrado facturas sin pagar que no estaban reflejadas en los presupuestos, por valor de 144.500 euros». El portavoz de la formación de Pedro Sánchez, Rafael Parra, añadió que «además, se ha producido un incremento en las deudas heredadas, debido a una aportación municipal de 27.000 euros de la subvención Dus 5.000 que le concedieron a la anterior Corporación y se tienen que afrontar otros 25.000 euros correspondientes a facturas de la dirección de obra del edificio multifuncional que no asumió tampoco el anterior equipo».
A todo esto se une también el arreglo de las piscinas municipales, para lo que se ha pedido un préstamo de 50.000 euros y, Parra añadió que: «Aunque el edificio multifuncional se va a poner en marcha, debe constar públicamente que supondrá un gasto anual para las arcas de este Ayuntamiento de 48.000 euros mantenerlo» y justificó las medidas tomadas en el plan sentenciando que «nosotros también queremos gobernar con recursos, no encontramos otra salida y estas decisiones no son plato de buen gusto para nadie».
El representante del Partido Popular, Antonio Luis Rodríguez, lejos de centrarse en los problemas actuales que llevan al equipo de Gobierno a tomar esta decisión, echó en cara una vez más a la Corporación «los 27.000 euros que se han gastado en el mobiliario nuevo del ayuntamiento» y se defendió del gasto efectuado por el equipo de mando anterior, el cual recordó que estaba conformado por «un gobierno de coalición entre PP, PSOE y Ciudadanos», afirmando que «todo lo que se ha gastado, ahí está y son cosas hechas para todos los vecinos».
Noelia Merino respondió una vez más al tema del mobiliario: «Este tema está más que explicado y debatido, no hemos gastado ningún dinero del pueblo, sino que fue una subvención».
El portavoz de Vox, Pablo Brufao, recordó que Merino, cuando se aprobaron los prespuestos de 2024, afirmó que «se trataban de unos presupuestos austeros pero eficientes» y rebatió la misma al aportar que «de eficientes nada porque en el sexto mes del año ya falta dinero».
La regidora de Carrascal se defendió una vez más argumentando que «es una situación heredada y estamos dando la cara para poder gobernar con la mayor dignidad posible».
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