Arrancan las obras del mirador más espectacular y vertiginoso de las Arribes

La intervención forma parte del Plan de Infraestructuras Turísticas en Espacios Naturales impulsado por la Junta de Castilla y León y supone la inversión de 175.100 euros en Aldeadávila de la Ribera, con una rebaja sobre el precio de salida de la licitación de algo más de 9.000 euros. “Se trata sin duda de un gran atractivo turístico a sumar, no solo para la localidad, sino para toda la comarca de Las Arribes y está en la línea de lo que entre todos se debe trabajar: el turismo como motor de desarrollo socioeconómico”, destacó el pasado miércoles Santiago Hernández, alcalde de la localidad.

Aunque la adjudicación oficial de la obra fue realizada por la Fundación Patrimonio Natural de Castilla y León, organismo dependiente de la Junta, el pasado mes de enero, las obras no se han realizado hasta que “ha finalizado el parón biológico obligado por tratarse de un entorno de gran valor natura, además de la época de alto riesgo de incendio”, señalaron ayer desde la Consejería de Fomento y Medio Ambiente.

Las obras en estos primeros momentos se centran en la limpieza de la vegetación y retirada de piedras para permitir la construcción de los pilotes sobre los que se asentará el gran voladizo, que es la parte más destacada del nuevo mirador. El nuevo “Mirador del Fraile” se suma a los otros dos existentes en las proximidades, el del “Picón de Felipe”, aguas arriba, y el que se descuelga sobre la presa del Salto de Aldeadávila, siendo muchos otros los que ofrece el Parque Natural Arribes del Duero.

Los arquitectos redactores del proyecto del nuevo “Mirador del Fraile” explican que tiene “dos diferentes velocidades y dos ambientes: uno que lleva al visitante a una punta con características vertiginosas, sumamente expuesta y con una visión completa de la famosa presa. Y otro mucho más pequeño idóneo para la contemplación de las aves, el río y el valle”.