Un anciano de Ciudad Rodrigo, auxiliado en su casa por segunda vez en menos de un mes

Un varón de 89 años tuvo que ser auxiliado en su domicilio por los Bomberos y la Policía Local tras alertar los vecinos de la calle Gerona de Ciudad Rodrigo de sus lamentos; esta es la segunda ocasión en menos de un mes que este hombre necesita los servicios de urgencia.

Pocos minutos después de las cuatro y media de la madrugada de hoy martes, el Servicio de Emergencias 112 Castilla y León recibió una llamada de auxilio ante «los lamentos y quejidos» que provenían de una vivienda del tercer piso del número 29 de la calle Gerona en Ciudad Rodrigo.

Hasta el lugar del aviso, el 112 CyL desplazó una dotación del Parque Comarcal de Bomberos de la Diputación de Salamanca en Ciudad Rodrigo así como una patrulla de la Policía Local que intentaron, sin éxito, que el varón les abriera la puerta del domicilio.

Ante la inactividad del hombre, los bomberos tuvieron que utilizar un camión escala para acceder a la vivienda por uno de los balcones, encontrándose al hombre tumbado, sin posibilidad de moverse y quejándose de un brazo. Tras conseguir sacarlo del domicilio, el equipo de profesionales sanitarios del 112 CyL constataron que el varón de avanzada edad tenía rota una clavícula, por lo que fue trasladado al Hospital de Salamanca.

Esta es la segunda ocasiónen menos de un mes que este hombre requiere de asistencia de los servicios de emergencia después de que el día 28 del pasado mes de junio, los vecinos de este mismo edificio de la calle Gerona de Ciudad Rodrigo alertaran de que había «mucho humo» saliendo de su vivienda. En aquella ocasión, el varón ahora herido, sufrió quemaduras leves en el brazo y costado derechos por los que tuvo que ser atendido en el centro médico.

Afortunadamente, el aviso de los vecinos y la rápida actuación de los bomberos impidió que las llamas se extendieran fuera de la cocina, punto en el que según las primeras investigaciones se habría producido el fuego.

Ya entonces, los vecinos del edificio señalaron que el hombre, a pesar de su avanzada edad, «vive solo y no tiene familiares que se conozcan cerca».

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