Secciones
Destacamos
Haciendo un guiño a los hermanos Cohen, no sé si España es país para viejos, habida cuenta de cómo se dilapida el dinero público, pero ... sí es país abonado para que se multipliquen los idiotas, hasta el punto de que esto, sea lo que sea ya España, es idiotilandia.
No doy crédito, ni en una Salamanca “tomada” por jeques de plastilina, ni en una España liderada por un perturbado político como es Pedro Sánchez, el hombre del traje azul que nació, con suerte, para estar en una oscura oficina de “Caja Madrid” en San Sebastián de los Reyes cambiando nóminas por juegos de sartenes antiadherentes, y que acabó en La Moncloa.
Qué gran verdad americana: cualquiera puede llegar a la Casa Blanca. A la Casa Blanca, o a La Moncloa, o a Downing Street... Sí, cualquiera, que en lugar del mérito y la oportunidad que se le supone a la entelequia, es hoy un peligro y un insulto a la inteligencia. De Pedro Sánchez a Irene Montero, y sumen a la lista... Sin olvidar a ese gran sátrapa que es Pablo Iglesias, origen y altavoz de tanto hedor.
Dice Pedro Sánchez, que ya ni se molesta en esconder su vergüenza, que la ley del “sí es sí” ha causado “un problema”... “y me quedo corto”. Muy bien, pues dimita, haga la maleta, recoja a su esposa, y váyase con el “Peugeot”, pues semejante chapuza legal no es de recibo, y menos que lo reconozca, pues en este caso no es un atenuante o un acto de contrición que, en otras circunstancias, le honraría.
Si el desconocimiento de la Ley no exime de su cumplimiento, legislar con semejante irresponsabilidad y coste social, no les capacita para estar en un Gobierno, ni en el de Suazilandia.
Con independencia de nuestro voto, no podemos estar más tiempo a merced de la ocurrencia, del interés personal, que es en lo que se ha convertido la política, en un negociado de asuntos propios.
Los españoles llevamos décadas abandonados a nuestra suerte, entretenidos con la televisión y el cotilleo más rancio; abandonados a disquisiciones que ni nos van ni nos vienen, como la polémica del sujetador abierta por Ione Belarra, otra de la lista.
En 2023 y hablando de sujetadores, algo que ya superamos en el San Francisco de 1967 o en el París del 68, elijan. Yo, que no he tomado drogas en mi vida, flipo.
Y no se relajen, que viene la Ley Trans pisando fuerte en el “debate” político y social. Y más lío e intoxicación mientras descubrimos que Siria todavía existe...
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Sigues a Juan Carlos García Regalado. Gestiona tus autores en Mis intereses.
Contenido guardado. Encuéntralo en tu área personal.
Reporta un error en esta noticia
Necesitas ser suscriptor para poder votar.