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El pasado fin de semana vi por enésima vez Nueve cartas a Berta. Necesariamente en blanco y negro, la película de Basilio Martín Patino ... describe una Salamanca provinciana que asfixia a Lorenzo, interpretado por un veinteañero Emilio Gutiérrez Caba. Estudiante de Derecho, tuvo ocasión de orearse en Inglaterra, donde conoció a una idealizada Berta, hija de exiliados que reemprendieron sus vidas fuera de su país. Regresó buscando el sosiego de su ciudad, pero se dio de bruces con una sociedad oscura, sumisa y plagada de prejuicios que poco había avanzado respecto de ese Tiempo de silencio narrado por Martín Santos. Nada tiene Lorenzo de revolucionario, pero sufre ante la pobreza de espíritu que le rodea y se rebela ante su destino. La Universidad le ofrece amistades y guateques, pero la vida intelectual es endogámica y estéril. Solo un viejo profesor afincado en Harvard, español que habla de su tierra con nostalgia durante su fugaz visita al Viejo Estudio, ofrece algo de luz a esa alma inquieta.

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lagacetadesalamanca Un mundo feliz