Nos ha prostituido

El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, será el que presida el centro. Nadie podrá dudar de que la decisión tiene mucho que ver con la política y con eso de las lenguas cooficiales que tanto le “mola” a sus socios, los insumisos independentistas que se pasan por el forro las decisiones judiciales respecto al español. Nada que ver con el interés general de este país, donde la lengua española representa el 8 % del PIB y mucho menos con el fin de los fondos europeos, que persiguen potenciar la industria del castellano para que alcance al menos el 15 o el 16 por ciento del PIB que representan otras lenguas en sus respectivas economías. Es verdad que San Millán de la Cogolla (La Rioja) fue el primer lugar en el que se hallaron vestigios escritos de nuestra lengua. Pero, como ayer denunciaron los responsables de las escuelas de español en una reunión que tuvieron con el consejero de Cultura, Gonzalo Santonja, en La Rioja no se mueve ni un euro en torno a una industria que en Salamanca acoge a unos 35.000 alumnos cada año y genera unos 50 millones de euros. Es decir, por una decisión política se quiere crear una industria donde no hay nada y se desprecia la experiencia, el trabajo y, sobre todo, el prestigio que tiene Salamanca en la enseñanza del español fuera de nuestras fronteras.

Es más que evidente que si le dan a elegir a Pedro Sánchez entre un hombre y una mujer, no hay duda de que se inclina por satisfacer a la socialista Concepción Andreu Rodríguez, presidenta de la comunidad riojana, frente al popular Alfonso Fernández Mañueco, presidente de Castilla y León. Con esta decisión también se ha puesto de manifiesto que la vicepresidenta Calviño no pinta nada en este Gobierno social-comunista. De hecho, la ministra se jugó una vez más su ya comprometido prestigio el pasado mes de enero, cuando respaldó a la Universidad de Salamanca en su papel “estratégico” en el PERTE de la Lengua. Una oportunidad que hemos perdido por obra y gracia de un señor socialista llamado Pedro Sánchez que está sometido a los “independes”.

Lo que me sorprende es la tibieza de la Junta y más de los responsables de Cultura, consejería que está en manos de la gente de Abascal. Supongo que en los próximos días el líder de Vox, que anda un poco despistado con las elecciones andaluzas, mandará a los “hombres de negro” para aleccionar a su personal. Están tardando en revelarse contra una decisión política y que satisface plenamente a los independentistas. Seamos razonables; ¿quién va a venir a estudiar el catalán, el gallego o el vasco? No digo que no cuidemos estas leguas, pero hay que ser realistas, hay 492 millones de personas que hablan español de forma nativa, siendo en esta modalidad la segunda lengua más hablada del mundo tras el chino mandarín.