Algo se está cociendo

Chup, chup. Borbotones en la cazuela del PSOE regional. Algo se está cociendo entre los socialistas de Castilla y León. Por ahora a fuego lento, pero en política siempre hay alguien dispuesto a subir la temperatura. Lo sabe bien Luis Tudanca que, ante el ataque, se ha enrocado en su posición en el tablero y fruto de ese movimiento defensivo ha llegado la destitución de la leonesa Nuria Rubio como viceportavoz del grupo parlamentario en las Cortes. Al enemigo hay que tenerlo cerca, pero no tanto.

Y no se crean que el paso de Rubio de viceportavoz a procuradora rasa tiene sólo una intencionalidad política, también lo es, sobre todo, económica y pecuniaria. Pasará de meterse 76.000€ brutos al año y 1.600€ al mes para gastos a cobrar por asistencia a plenos, comisiones y kilometraje. Y claro, no es lo mismo. Es su castigo por andar de tramas indiscretas con su amigo Javier Alfonso Cendón, secretario provincial del PSOE de León y uno de los chicos de moda en Ferraz, donde parece ser del agrado de Pedro Sánchez y su corte. Suya, entre otros nombres, fue la maniobra para colocar a Nicanor Sen como delegado del Gobierno en Castilla y León sin que Tudanca tuviera voz ni voto.

La brecha se ha abierto por un PSOE de León que siempre presume de ser el primero en el ranking de militancia en la comunidad y el que mayor peso tiene en los órganos del partido. Tudanca tiene el problema en casa. La posibilidad de su relevo al frente de la secretaría autonómica del PSOE ha trascendido de las conversaciones de barra, también de entre los manteles de algún restaurante en Tordesillas, para desembocar en el foro general de la política regional. Algún compañero socialista, caso del alcalde de Ágreda, no tiene problema en pedir públicamente que dé un paso al lado para dejar entrar aire nuevo. En esa lista también están muchos de los 'susanistas' que apostaron a perdedora en las últimas primarias.

El problema para Tudanca es que es un 'sanchista' sin Sánchez. Sus críticas a las maniobras de Ferraz en la configuración de las listas electorales en la comunidad han abierto una herida camino de Guadarrama y el líder regional del PSOE no cuenta ya con los mismos apoyos dentro de la M-30, donde más parece que le den por amortizado tras ganar unas elecciones y perder otras.

Por eso, malician algunos socialistas, están en el PSOE regional deseosos del adelanto electoral de Mañueco. Eso pillaría sin tiempo para terminar de cocinar al nuevo candidato. Chup, chup.