AMALIO GOMBAU GUERRA

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El 7 de agosto de 1900 el matrimonio Venancio Gombáu y Francisca Guerra, cuando tienen su estudio de fotografía en la calle de Arriba, número 9, con acceso también por el paseo de las Carmelitas, ven morir a su primer hijo con cinco años, al que habían puesto el nombre de Amalio. El 16 de enero de 1901 nace otro hijo varón, en el mismo domicilio, al que vuelven a poner idéntico nombre.

Viviendo ya en la calle del Prior, Pilar Tavira, famosa novelista que tiene una tienda, «Modas de París» en Prior 4, denuncia ante la policía que los hijos de Venancio Gombáu y de la viuda de Palencia han roto la luna del escaparate de su establecimiento, jugando al balón. Es la misma Pilar Tavira Domínguez que vive en la Plaza Mayor, 24 d) y tiene una Academia de corte y confección donde da clases gratis por la tarde a jóvenes pobres y a las «criadas de servir» como se decía entonces. Falleció el 03/09/1982.

Amalio, en 1921 hizo el servicio militar en el aeródromo de Cuatro Vientos donde llegó a la graduación de sargento. Aficionado a las actividades aeronáuticas, voló a Marruecos una vez terminada «la mili» y se estableció con estudio en Getafe, siendo de esta época las fotos africanas, entre ellas la de la cabeza cortada de Abd-el Krim, que tanto ha dado que hablar.

Se trasladó a La Coruña en 1928, alquilando el Estudio Droguería y Farmacia de los sucesores de José Villar de la calle Real 84. También abrió estudio en Bilbao y al morir su padre regresó a Salamanca, haciéndose cargo de la sucursal de Ciudad Rodrigo, en la que conoció a la que sería su esposa Carmen González, con la que contrae matrimonio en 1933. El año anterior había traspasado el estudio a Emilio Sanz, cerrando al poco tiempo el de Getafe, trasladándose a Medina del Campo, abriendo otro en la calle Gamazo, que traspasa a «Foto Esperanza» al terminar la guerra civil.

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Al morir su madre regresa a Salamanca y se hace cargo del estudio de la calle del Prior, que traslada a finales de 1944 a la calle de Zamora, número 3, planta primera, donde permaneció hasta su muerte en 1970.

Son célebres sus fotografías de la detención de obreros participantes en la huelga general de 1932 por parte la Guardia de Asalto en la calle de Sánchez Barbero y alrededores o las grandes paradas militares de la Plaza Mayor con motivo de la presentación de las cartas credenciales de los embajadores de Italia, el periodista Roberto Cantalupo, sustituido a los 3 meses dadas sus desavenencias con el Caudillo por el conde Guido Viola di Campalto, de Alemania, el general Wilhem von Faupel pues su sustituto Eberhard von Stohrer ya las presenta en Burgos, de Francia el laureado mariscal Petain, (con la anécdota de que cuando sale del Gran Hotel a dar un paseo, se está celebrando en la Plaza Mayor un acto conmemorativo del 2 de mayo, con lo que le dan un rodeo y le llevan a visitar los monumentos) y los Nuncios del Vaticano Federico Tedeschini, Gaetano Cicognani e Ildebrando Antoniutti.

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Fue fotógrafo del Hospital Clínico y de la Facultad de Medicina por lo que aparecen en los archivos de don Venancio negativos de Amalio con curiosas fotos de casos patológicos de deformaciones o enfermedades de miembros humanos.

El Ayuntamiento se interesó en adquirir el archivo de Gombáu y llegó a un acuerdo en 1986 con la hija única de Amalio, Carmen Gombáu González, residente en Toro, por el que se le entregó la parte que había conservado Amalio en la calle de Zamora y que ella había depositado para su mejor conservación en manos del fotógrafo toresano y amigo José Luis de la Parra. Fueron 4.180 placas de cristal, 1.026 negativos en soporte de celuloide y otros 5.206 en rollos de paso universal. Se estima que más de la mitad de los cristales y placas fueron obra de don Venancio y el resto serían trabajos de Amalio y Guzmán, siendo mayoría los del primero.

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El archivo se ha duplicado en la sede de la Filmoteca con copias para consulta de investigadores e interesados.

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