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Nos vamos sumergiendo en este proceloso mar de dudas que abre nuevas expectativas en 2024. Nuevas no por esperadas, ya ven que el inquilino de Waterloo no se acaba de fiar de su mejor amigo y no cede y, a cambio, consigue lo que pedía, lo estamos viendo esta semana y mucho me temo que será el pan de cada día en la Cámara Baja.
Sánchez mira a izquierda y derecha y no acaba de ver que quienes le apoyan en la investidura no lo van a hacer en el transcurso del mandato si no ofrece garantías de cumplimiento de promesas que comprometen muy seriamente a nuestra Constitución.
De momento vemos al viejo lehendakari quejándose por las esquinas sin encontrar una solución clara porque Feijóo también pide monedas a cambio de apoyos solo en determinados decretos.
Así las cosas, será muy complicado el avance, tengo dudas de ver Presupuestos Generales en marzo y más aún de que las ayudas europeas, 10.000 millones, lleguen a tiempo.
Esta puede ser una lectura muy general que genera preocupaciones en ese mar de dudas en el que algunos lo tenemos claro. Hablo de la recuperación de líneas férreas, de recuperación de frecuencias entre Salamanca y Madrid de forma inmediata.
Hablamos de economía, de progreso, de trabajo. No se pueden ofrecer viejas máquinas abandonadas en Galicia, parece una broma o una respuesta a las demandas ciudadanas que suena a chiste, que suena a arbitrariedad y provisionalidad.
No se pueden callar bocas así, en Salamanca se sigue adelante con la movilización del próximo 21 de enero y está claro que se requiere una respuesta convincente que pasa por el acortamiento de plazos para la recuperación de la vía férrea de la «Ruta de la Plata».
Más aún si hablamos de comunicaciones con Portugal y Europa, lo hemos reiterado en varias ocasiones y no nos cansaremos de hacerlo aún más.
Es muy importante para la proyección económica, industrial y laboral de Salamanca que el eje Atlántico sea una realidad, lo dijo hace unos días el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, en su primera entrevista del año en la radio: «Hay que conseguir más frecuencias, sin duda alguna. Y algo todavía mucho más importante es la conexión de Salamanca con Portugal, porque eso va a permitir conectar Oporto con Madrid y en el medio está Salamanca», palabras de Fernández Mañueco que suscribimos en su totalidad y a las que sumamos la finalización de la electrificación de la vía férrea entre Salamanca y Fuentes de Oñoro.
Hablamos de un montante económico importante que por el momento se desvía hacia el eje mediterráneo dejando al oeste español, incluida Salamanca, en el más oscuro olvido.
Ahora hacen falta presupuestos generales y muy especialmente ayudas europeas destinadas a cumplir con miles de ciudadanos que quieren trabajar y progresar.
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