Corredor Atlántico

Aún recuerdo cuando en 1985 el gobierno socialista de Felipe González y del ministro Enrique Barón decidieron la radialidad de la red ferroviaria haciendo pasar todo el entramado por Madrid y eliminando así cualquier posibilidad de viajar de Norte a Sur por el oeste peninsular.

La eliminación de la conocida Ruta de la Plata fue el golpe que faltaba para el olvido de varias comunidades autónomas, especialmente Extremadura y Castilla y León. Ni viajeros, ni pasajeros.

En estos momentos tan solo tenemos ruta de norte a sur a través de carretera en un único bus que se desplaza entre La Coruña y Cádiz en un tedioso viaje de 12 horas. Parece mentira que en pleno siglo XXI sigamos sin comprender que la reapertura de la vía férrea entre Cádiz y Gijón es absolutamente necesaria, que abarata costes y que nos conecta directamente entre África, América, Portugal y Europa.

«El Gobierno va a enterrar otra vez la ruta de la Plata. La opción de que el ferrocarril cerrado por Felipe González en 1985 tuviera una mínima probabilidad de recuperación a partir de 2030 queda descartada al esquivar su inclusión en la red básica ampliada de la red transeuropea de transporte (RTE-T)».

Con este titular nos hemos encontrado en las últimas horas en varios diarios nacionales en respuesta a diputados nacionales liderados por José Antonio Bermúdez de Castro a la «metodología europea». Nos llevan al 2050 después de 20 años de espera y de promesas incumplidas.

Pues que sepa el Gobierno central que se equivoca, una vez más, la recuperación de la vía férrea entre Astorga y Plasencia es una necesidad absoluta.

Una necesidad que recupera el traslado de pasajeros y mercancías de forma rápida y segura evitando el nudo gordiano de Madrid.

Recuperar esta vía férrea nos acerca a los puertos de Algeciras en España y Aveiro, Oporto y Leissoes en Portugal justamente por el camino más corto y hacia Europa colocando a Salamanca en el nudo de comunicación más importante de ese Corredor Atlántico junto a otros no menos importantes en Badajoz, Cáceres y Zamora.

Hablamos de recuperación económica, hablamos de repoblación y ciertamente no es difícil de entender porque Europa aporta 700 millones de euros para dar el primer paso y no se acaba de entender que se deje pasar un momento importante, muy importante para nuestra tierra olvidada.

Como ya hemos adelantado, el gobierno afirma que es la «metodología europea» la que, asegura, impide incluir el tramo Astorga-Plasencia en la red básica ampliada. Es la que tiene horizonte de ejecución en 2040, 10 años antes de lo previsto ahora y 10 años después de lo que debería ser una realidad.

Alguien no ha hecho los deberes, ahora es el momento de luchar por este proyecto, la recuperación de la Ruta de la Plata, la creación del Corredor Atlántico.