Inmigración y despropósito

El miércoles 10 de julio, durante la reunión de las CC.AA. con el Gobierno celebrada en Canarias, las Comunidades presididas por el PP votaron a favor de un cupo de jóvenes inmigrantes no acompañados (Menas). Los separatistas catalanes se negaron a recibir en sus cuatro provincias a ningún inmigrante de los llegados masivamente a Canarias.

Por otra parte, no parece que se vaya a llegar a un acuerdo en la necesaria modificación de la Ley de Extranjería, en la cual se obliga a un modelo de distribución de los menores una vez que los territorios saturados alcancen el 150% de su capacidad de acogida.

En esto el Partido Popular será clave en la negociación, pues es el único capaz de aportar los votos suficientes para que la reforma de la ley salga adelante después de que Cataluña haya anticipado que sin el reconocimiento de su singularidad en materia migratoria no la aceptará. La portavoz de Junts en el Congreso avisó de que el Gobierno no contará con sus siete votos si la reforma de la ley no excluye a Cataluña.

Nada más anunciar los presidentes autonómicos del PP su apoyo a esta primera medida (tan sólo 347 menas para todas las comunidades), el líder de Vox, Santiago Abascal, anunció que su partido abandonaba los gobiernos autonómicos en los que está junto al PP. Algo incomprensible para cualquiera que no comulgue con semejante sectarismo.

Abascal, en un acto celebrado con la francesa Le Pen ya había dicho lo siguiente:

«La inmigración ilegal masiva trae delincuencia masiva, inseguridad, expande el fundamentalismo islámico y pone en riesgo nuestras vidas. La inmigración ilegal masiva pone en riesgo a las mujeres. Sí, destroza los servicios públicos. Arroja los salarios por los suelos. […] Destruye nuestra identidad y destruye nuestro ser histórico. […] Es la inmigración ilegal masiva que promueven los socialistas y la derechita cobarde y estafadora».

Ya se ve por dónde anda Abascal: en la demagogia desesperada y desesperante.

Y en esto, un inmigrante de 16 años llamado Lamine Yamal le metió un golazo por la escuadra a la selección de Francia. ¿Y qué dijo Manuel Gavira, portavoz de Vox en el Parlamento andaluz? «Si no lo hubiera marcado él lo hubiera marcado otro». Y lo dijo en una rueda de prensa en la que vinculó «la inseguridad y la criminalidad» a la inmigración. Ya se ve por qué andurriales se mueven ahora estos pájaros de Vox.Yo les recomiendo a ustedes a propósito de la inmigración la lectura del libro Los mitos de la inmigración, de Hein de Haas, editado por Península.