Kit, te necesito

Al personaje de Roberto Benigni en La Vida es Bella se lo llevaron junto a su hijo a un campo de concentración nazi. Cuando el niño le preguntaba a su padre por lo que estaba sucediendo, éste le sonreía y le decía que no había nada de qué preocuparse, que solo se trataba de un juego y que el ganador se llevaría un tanque como premio.

Cuando a los niños hay que darles una mala noticia se va preparando el terreno y se les va soltando poco a poco. Se les mira con gesto despreocupado -para que no vean la preocupación en tu rostro-, se les empieza diciendo que todo está bien, que no se preocupen y luego vas colando de manera escalonada los 'peros'.

Con esa misma indulgencia con la que se trata a un niño, la Unión Europea le está diciendo a sus ciudadanos que, aunque no es por nada en concreto y no hay que preocuparse, no estaría mal -o mejor dicho, es obligatorio hacerlo- que todos los europeos tuviéramos en casa un kit de supervivencia de 72 horas. Lo típico por si hay una dana, una pandemia… o una guerra mundial.

Lo han comunicado con unos 'simpáticos' vídeos a través de redes sociales donde la Comisaria de Gestión de Crisis, Hadja Lahbib, va sacando objetos de su bolso mientras se le escapa la risa, se le caen las cosas de las manos… Todo muy desenfadado porque, recordemos, no hay de qué preocuparse.

No me he dedicado a buscar cómo ha caído la recomendación en otros países, pero en España, como estamos acostumbrados a tomarnos casi todo a broma, menos las bromas, tengo la sensación de que no se le ha hecho caso a la noticia. Los periodistas sí. Estamos escribiendo de ello, indagando sobre qué debería contener ese kit de supervivencia, pero no palpa ni la más mínima alarma entre la ciudadanía.

El caso es que lo que nos están recomendando esta vez no es que nos preocupemos de tener suficiente papel higiénico en casa, que es lo que nos quitaba el sueño y el tránsito intestinal en marzo de 2020. De momento, lo que nos dicen es que procuremos tener a mano linternas y una radio de largo alcance. Inquietante, como mínimo.

También proponen que todos los ciudadanos deberíamos tener en casa una buena cantidad de dinero en metálico. Siempre he estado tranquilo de que si alguien entrara a robar en mi casa lo más valioso que iban a encontrar es mi foto con Julio Iglesias. Y como servidor, la gran mayoría de trabajadores por cuenta ajena que en cash llevamos lo justo por si nos toca pagar el café, pero como la gente empieza a hacer acopio de billetes bajo sus colchones vamos se avecina una movida temporada de asaltos a viviendas.

Los líderes europeos siguen hablando del kit de supervivencia y te piden lo normal: latas de conserva, agua mineral, pilas y unas pastillitas de yodo… pues para lo que son: porque puede que tengan un buen sabor o, quizás, por ese pequeño detalle de que son absolutamente necesarias en caso de radiación nuclear.. Pero vamos, que no hay de qué preocuparse.

La verdad es que se ha puesto el mundo con un reparto de personajes que dejan en sosería la última temporada de Juego de Tronos: Trump, Vance -ojo con éste-, Putin, Kin Jong-Un, los de Oriente Medio que no sé ni pronunciar…

Me preguntaba un amigo si pienso que a nuestra generación nos tocará vivir el fin del mundo y ya no descarto nada. No sé cómo lo hacen pero ya empiezo a tener asumido que el Barça se vaya de rositas con lo de Negreira.