¿Sabes quién es Ana Peleteiro? Es esa chica negra gallega a la que los españoles estuvimos apoyando y animando cuando ganó una medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Tokyo. Pues bien, resulta que ahora mismo a Ana Peleteiro una panda de descerebrados (y lo voy a dejar ahí, pero la palabra que tengo en la cabeza rima con fruta) se han dedicado a desearle incluso la muerte en las maravillosas «redes suciales».
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¿Por qué? Por hablar. Porque resulta que hay un gran grupo de personajes que han decidido que sólo debe haber libertad de expresión si dices lo que ellos quieren oír. Curioso. Ana comentaba que, a nivel profesional (ojo, que es un dato importante) no veía justo que mujeres trans participen en competiciones femeninas. Decía que, en triple salto, que de eso sabe ella un rato, una mujer podía saltar unos 15 metros, mientras que un hombre está en los 18. Yo tampoco creo que sea justo, pienso que no es competir en igualdad de oportunidades.
¿Ha dicho Ana que una mujer trans no tenga todo el derecho a ser reconocida como mujer? No. Todo lo contrario. Pero como el insulto es gratuito se han cebado con ella. Dudo que sean capaces de decírselo a la cara porque son cobardes, son ratas. Yo te doy mi opinión sobre este tema. Es mi opinión, si no estás de acuerdo podemos hablarlo. Coincido con Peleteiro. No me parece justo. Estaba pensando en el deporte paralímpico ¿no existen diferentes categorías para que todos los deportistas paralímpicos puedan competir en igualdad de condiciones? Es más, recuerdo que, cuando Pistorius (dejemos de lado sus temas judiciales posteriores) compitió en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 hubo una gran polémica porque muchos consideraban que sus prótesis le conferían ventaja sobre otros competidores. ¿Es posible crear una categoría específica para mujeres trans en el deporte? Sí, claro que sí. Repito que estoy hablando del deporte profesional. ¿Tienen las mujeres trans ventajas por su físico en determinados deportes? Por supuesto que también.
Por eso en ningún momento digo que no deban competir, digo que compitan en otra categoría, siempre que su físico sea una ventaja. En deportes, como la equitación, donde hombres y mujeres compiten juntos, daría igual. Pero claro sé que opinar así no le va a gustar a todo el mundo, que es más fácil irse a lo políticamente correcto, instaurarse en el «bienquedismo»… No va conmigo. Yo soy team Peleteiro.
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